Puede parecer exagerado decir que el Cacereño se la juega a todo o nada ante el Lealtad (12.00 horas, Príncipe Felipe). Pero aunque aún queden tantos puntos en juego como ahora suma --y de ahí que Angel Marcos diga que dependen de sí mismos--, el equipo necesita poner fin a su mala racha sí o sí para creerse que es capaz de salir adelante.
"No es un partido definitivo, pero sí importante", asume Marcos, que no escatima elogios para una plantilla a la que ve "bien" y con "fe en sus posibilidades". "Veo al equipo muy competitivo, muy intenso y complicando a los rivales; creo que los jugadores no han perdido la fe, la tienen aumentada, porque su trabajo es bueno".
Pero con el buen trabajo no basta. El Cacereño no gana desde el 6 de diciembre y desde que comenzó el año, solo dos empates, solo dos goles en diez jornadas, el último, el 31 de enero en Valladolid. Desde entonces, cinco partidos en blanco, 485 minutos sin ver puerta.
A pesar de todo, Marcos está instalado en el "pensamiento positivo". Es su obligación, reconoce. "El equipo me ofrece garantías para sacar esto adelante, no somos inferiores a nadie, pero nos falta la cualidad más importante del fútbol, el gol. Llega cuando menos lo esperas. Igual que los hemos perdido, puede volver a llegar. Y trabajamos para que llegue este domingo". Está el técnico convencido de que "la fortuna tendrá que sonreírnos algún día". Quizás sea hoy.
LA FALTA DE GOL El último tanto de los verdes lo marcó Carlos Valverde, que hoy volverá a la convocatoria después de perderse por lesión los cuatro últimos compromisos. "Con Valverde tendremos más juego directo, aunque es imposible que juegue los 90 minutos", reconoce el técnico. La voluntad de ayudar del jugador es total, pero sabe Marcos que debe ir introduciéndolo poco a poco. "Antes de los problemas estaba en un buen momento goleador", añade el preparador, que confía en recuperarlo para esa tarea tan necesaria para este equipo.
Cree Marcos que con 10 jornadas por delante, 30 puntos aún en juego, dependen de sí mismos para salvarse, que todos los equipos dependen de sí mismos para conseguir sus objetivos. "No hay nada decidido. Será a partir de ahora cuando se decida todo lo que vayamos a ser. Quieras o no, todos dependemos de nosotros mismos", reitera.
Llega el CPC sin bajas a este encuentro, con la única ausencia del último en llegar al equipo, el centrocampista holandés Hans Mulder. El club espera tener el transfer a principios de la próxima semana. Ha citado el técnico a todos los jugadores en el Príncipe Felipe y solo allí dará la lista de los 16 que se enfrentarán al Lealtad de Villaviciosa. "Es un equipo bien trabajado, con buenos jugadores y buenas perspectivas en Segunda B. En casa es dificilísimo y fuera están sacando puntos en campos complicados. Un rival complicado", concluye Marcos.
