Un 12 de noviembre de 2007, tras su triunfo por 2-0 en el Príncipe Felipe ante el Villanovense, el Cacereño se ponía líder en la jornada decimotercera. Casi un año después, el 9 de noviembre de 2008, el club verde vuelve a estar en lo más alto de la tabla, tras la victoria del pasado domingo por 0-2 frente al Sporting Villanueva en la undécima jornada. Entre ambas fechas, la entidad ha vivido una montaña rusa de circunstancias que lo abocaron finalmente a cambiar de manos.

Con la marcha de Félix Campo y la compra por parte del empresario zafrense Antonio Martínez Doblas, el club de la carretera de Salamanca parece haber cambiado de marcha . El concepto es otro. La filosofía también. También lo son las formas, la manera de comportarse, el estilo de juego, la apuesta decidida por la cantera y por devolver al Príncipe Felipe a gente criada en la casa... El club ha dado un vuelco. Y la recompensa parece haber llegado demasiado pronto.

Tiempos de cambio

Con la llegada de Martínez Doblas se produjo la de Angel Marcos, al frente de la dirección general. El ha sido el ideólogo del nuevo Cacereño y, en gran parte, responsable del cariz que los acontecimientos han tomado y de la recuperación de gran parte de la hinchada, ausente o desaparecida los últimos años del estadio.

Pero los laureles han de ser, sin duda, adjudicados a Angel Alcázar. El técnico ha sabido dar vida a un equipo totalmente nuevo. Con solo dos jugadores de la pasada temporada --el capitán Sergio y el goleador Toni--, ha sabido dotar de personalidad a un equipo con el que se identifica cada vez más el aficionado cacereño.

Los resultados ahí están. Líderes, sin perder un partido, segundo equipo más goleador --24 goles--, menos goleado junto al Villanovense --6 goles--... Ahora queda lo más difícil: refrendar el buen momento del equipo y hacer que la racha dure. Un reto importante será este domingo ante el Moralo, equipo sorpresa en el arranque de temporada.

No hay que olvidar que este año ser primero en la liga regular tiene premio. En una primera eliminatoria, los 18 campeones de los 18 grupos de Tercera se medirán nueve contra nueve. Los ganadores ascenderán automáticamente, mientras que los perdedores pasarán a una segunda eliminatoria. Una doble opción de ascenso, pues.

La función de Alcázar será ahora evitar que ocurra lo del año pasado. Tras encaramarse al primer puesto, los de Nacarino se desinflaron de manera alarmante. En los primeros 13 partidos sumaron 30 puntos. En los 25 restantes, ¡solo se sumaron 25 puntos! El vértigo del liderato empezó la jornada siguiente --se perdió 2-0 con el Imperio-- y acabó provocando una verdadera sangría --7 partidos ganados, 4 empatados y 14 perdidos--. Entonces se acabó noveno a 27 puntos del Don Benito. El Moralo pondrá el domingo a prueba la consistencia de este líder.