El centrocampista Borrallo y el central Merino se suman a la lista de bajas del Cacereño. Con ellos, ya son siete los jugadores que han abandonado su disciplina desde principio de temporada. Los dos futbolistas, que rescindían su contrato tras llegar a un acuerdo con el club verde, ficharon ayer por el Puertollano.
"Es algo que me imaginaba", afirmaba ayer el vicepresidente Juan Ojalvo, que reconoce estar molesto por la actitud de los jugadores. "Vinieron a hablar con nosotros alegando asuntos personales y de índole económica para dejar el club. Nos preocupamos por su situación para intentar ayudarles, pero luego argumentaron que tenían una oferta importante y que lo tenían decidido", añade. A partir de este momento, los jugadores se pusieron en contacto con el presidente y éste, después de arreglar el asunto económico, decidió dar vía libre a la rescisión pues, según Ojalvo, "pensamos que si un jugador no está a gusto con nosotros es mejor que no esté". Una decisión que trastoca, de nuevo, los planes de Bernardo Plaza, que respeta la decisión tomada por los jugadores. "Han tomado una decisión y punto. Les deseo mucha suerte pero nosotros a lo nuestro, a mirar a delante para conseguir el objetivo" señala el técnico.
Para cubrir las bajas, el club sigue trabajando en nuevas incorporaciones. La primera llegará hoy: un jugador de banda que ha militado en Segunda B y al que Plaza ya conoce. Las demás tendrán que llegar en breve pues el día 31 finaliza el plazo para inscribir a nuevos jugadores.
