La plantilla del Cacereño recibió ayer un pequeño respiro: el club satisfizo la mitad de la deuda económica que arrastraba con los jugadores, que era de dos mensualidad. Tras pagarse la de marzo, ya solamente quedaría abonar la de abril.

«Agradecemos mucho el esfuerzo y la profesionalidad que han mostrado los futbolistas en una circunstancia que sabemos que ha sido complicada para la mayoría de ellos», comentó ayer el director general del club, Luis Puebla, que añadió que se está trabajando para pagar el resto de la deuda lo antes posible.

El equipo prepara así más tranquilo el último partido de la liga regular, que será mañana en Sierra de Fuentes ante el Amanecer. El objetivo es conseguir la victoria y, como mínimo, asegurar el segundo puesto. Para ser campeones habrá que esperar un tropiezo del Don Benito en su visita al Montijo.