El Cacereño afronta hoy un duelo crucial ante el Vecindario (12.00 horas). El partido en Canarias puede significar respirar muy hondo en la tabla en el caso de que se consiga el triunfo. Y el entrenador, José Luis Montes, y sus futbolistas lo saben bien.

El técnico segoviano concede una importancia capital a este encuentro. "Ganar sería importantísimo, porque luego tenemos una serie de partidos con equipos de abajo. Nos podríamos en la mitad de la tabla. Sería tener más de la mitad de la permanencia conseguida. Si tonteamos, nos podemos complicar hasta el final, pero si nos sale un buen mes de febrero, teníamos mucho ganado", apunta.

Del rival, analiza. "Ha tenido una reacción parecida a la nuestra. Estaban mal, cambiaron de entrenador y ganaron unos partidos importantes. Están por delante de nosotros. Tiene jugadores de calidad y ya sabemos que en casa los canarios son complicados. Tienen arranques de genios. Va a ser un partido difícil, pero también para ellos", analiza el entrenador verde en el prepartido, al tiempo que avisa a su rival sobre el momento que atraviesa su equipo: "el Cacereño no es ninguna perita en dulce".

Lo más complicado será armar un once de garantías teniendo en cuenta las bajas de tres hombres importantes del centro del campo: Abel Segovia, Lolo y David Rocha. Montes ha probado distintas fórmulas. En principio, el canterano Manolo será fijo en el doble pivote. Con él estará Gonzalo o puede incluso que Mario Carrizosa. Rives vuelve y puede que el de Azuaga pueda reconvertirse como medio centro defensivo. Así lo ha probado el técnico en los últimos entrenamientos. También está la alternativa de Juanín.

Además, Carlos o Prats (con más opciones para el primero) estarán en el cuarteto de centrocampistas y Montes mantiene la duda de si alinear a Mauri o Alex para acompañar a Luismi.

En su línea de no inmutarse ante las circunstancias teóricamente positivas para el rival, el entrenador segoviano sigue desdramatizando. "Nos va a dar igual el césped artificial".

Viaja el meta Arturo, que quiere irse. Dieguito no estará.