Ismael Díaz tiene crédito, al menos hasta el domingo. El presidente del Cacereño, Félix Campo, mantiene su confianza en el entrenador asturiano y le ha prolongado un margen de error hasta el derbi del próximo domingo ante el Villanovense, en el que los dos equipos se juegan buena parte de la temporada.

La mala racha del Cacereño (cuatro derrotas consecutivas) han creado un clima de extrema preocupación en el club verde, que ha visto cómo el Betis B está a un solo punto del puesto de promoción que aún ostenta el grupo de Ismael Díaz. Durante las últimas horas, Campo se ha reunido con sus más estrechos colaboradores, y también con el propio Díaz, para calibrar exactamente el estado de ánimo de técnicos y jugadores.

El equipo, pese a todo, confía en invertir la racha, algo que se lograría venciendo a un Villanovense (con siete puntos menos) que llegará aún más necesitado de puntos. Santi, con problemas de ligamento, puede prolongar su baja durante al menos tres semanas, Cobos será sancionado y volverá al menos uno de los delanteros: Joaquín o Morgado.