Segundo derbi para el Cacereño esta temporada y segundo partido sentimental para Juan Gabriel Jaraíz, que, como ya pasó contra el Badajoz, el domingo vuelve a enfrentarse a uno de sus exequipos, el Villanovense. El futbolista verde, ausente la pasada jornada en Cádiz por un problema en los isquiotibiales, entrenó ayer con normalidad y espera confirmar esa mejoría en la sesión de hoy, en la que Pedro Pablo Braojos, como cada jueves, programa un partidillo.

La última vez que Jaraíz se perdió un partido por lesión fue hace cuatro temporadas. Entonces jugaba en el Villanovense y un esguince le impidió enfrentarse al Imperio. "Y si me perdí aquel partido fue porque se jugó entre semana", recuerda el protagonista. Desde entonces ha sido un fijo en las alineaciones del conjunto serón primero, del Badajoz después y ahora en el Cacereño. Los partidos en los que no ha participado desde entonces han sido siempre por sanción.

Si para él fue especial enfrentarse al Badajoz, mucho más lo es al Villanovense, club en el que estuvo cinco año y que dejó siendo uno de los capitanes. "Le tengo mucho cariño", confiesa, "pero nosotros tenemos que ganar o ganar, porque la tabla se está rompiendo y mientras que el descenso lo tenemos muy cerca, los de arriba se nos escapan".

El futbolista, que ha jugado este año tanto de lateral como de extremo, siempre por la derecha, explica que deben mantener el nivel que están mostrando en casa. Pero no solo eso, pues Jaraíz reconoce que lo que les falta es "rematar los partidos". "Tenemos un equipo compensado, con las ideas claras y que va a más; creo que podemos hacer cosas bonitas, aunque es mejor ir paso a paso", añade.

Con la recuperación de Jaraíz, el técnico Braojos tiene a toda la plantilla disponible para el derbi excepto al cantera Alfonso, la única incógnita salvo contratiempos de última hora.