Cacereño: Pedro, Antonio, Jabuto, Andrada, Garrido, Pulido, Avila, Lolo, Emilio Rosa (min. 88, José Miguel), Willy y Fabiani (min. 64, Javi Núñez).

Villafranca: David, Tomi, Juan Pedro, Cano, Manu, Nacho (min. 64, Gordillo), Jorge, Isaac (min. 83, Manolo), Miguel, Kikoché (min. 64, Abel) y Mariñas.

Goles: 1-0, min. 21: Antonio. 2-0, min. 36: Avila. 3-0, min. 79: Willy.

Arbitro: Olivera Vázquez (0). Expulsó por doble tarjeta amarilla al visitante Manu (77´) y enseñó la cartulina amarilla a los también visitantes Cano y Nacho.

Incidencias: Apenas 200 espectadores en las gradas del Príncipe Felipe, algunos incluso con animación incluida. La tarde comenzó soleada y acabó con mucho frío. Terreno de juego muy irregular.

Punto de inflexión en la temporada para el Cacereño. El equipo de Miguel Angel Mateos, sin realizar un partido fuera de lo común, pasó por encima del Villafranca, un equipo bien clasificado y que ayer defraudó en el Príncipe Felipe por su pasotismo y su escaso fútbol.

Los cacereños terminan el nefasto 2005 con una sonrisa ante su afición. Tras auténticos bodrios y esperpénticos partidos ofrecidos a sus escasos, aunque fieles seguidores, los verdes se solazaron con su parroquia tras un partido en el que hicieron lo mínimo que se exige a un equipo del historial del Cacereño. Lo peor de todo para Miguel Angel Mateos puede ser que en vista del éxito que le da un equipo plagado de bajas su presidente le deje sin fichajes y tenga que apañarse con lo que tiene. El técnico de Malpartida de Plasencia, lejos de quejarse, asegura que "lo importante es que no se vaya ninguno".

El Cacereño logró ayer una victoria sin estridencias, con un partido en el que los mínimos se cumplieron y en el que los parches tácticos funcionaron mejor que las soluciones convencionales. Pulido se pareció al jugador que destacó la temporada pasada en el Amanecer jugando como pivote en el centro del campo y Jabuto se adaptó bien al eje de la defensa, donde se inició como futbolista. Además, Avila y Emilio Rosa estuvieron metidos en el partido desde el pitido inicial y brillaron en algunos momentos.

Lástima que delante no estuvo el equipo que pelea por acercarse a la cuarta posición. El Villafranca parecía estar resacoso tras una cena de empresa y tardó en conectarse al partido. Cuando lo hizo ya llevaba dos goles en contra y tenía a un Cacereño muy centrado en tareas defensivas como para dejarse comer el terreno.

SIN OCASIONES No hubo apenas fútbol ni llegadas al área en el primer cuarto de hora. Sólo dos disparos lejanos de Jorge y Avila alteraron las pulsaciones de Pedro y David. Pero a los veinte minutos llegó la jugada polémica del partido y Olivera Vázquez decretó penalti por unas supuestas manos de un defensor villafranqués en pugna con un atacante cacereño. Antonio lanzó la máxima pena y David acertó con su intención. El rechace le llegó de nuevo al capitán verde y David volvió a leerle correctamente la idea, pero en la tercera tentativa y ante la pasividad de la defensa el balón acabó en la red.

Un cuarto de hora más tarde la suerte dobló su cuota deudora con el Cacereño y un disparo lejano de Avila tras pase de Emilio Rosa lo desvió Cano a su propia red para hacer subir el 2-0.

Tras el descanso hubo un momento en el que el Villafranca acumuló efectivos y ocasiones en el área cacereña, pero Miguel, en dos ocasiones, y Mariñas, no acertaron con todos los pronunciamientos a su favor. Con diez en el campo --Manu fue expulsado en el 77 por doble amarilla-- se tornó más complicada aún la afrenta para el Villafranca. Y el remate definitivo ya fue el 3-0 tras marcar Willy por bajo tras un servicio desde la línea de fondo.

La grada agradeció el esfuerzo al final del encuentro y premió al equipo verde con la mayor ovación de la presente temporada.