Fueron, sobre todo, dos horas muy divertidas de radio en directo. 'El partido de las doce', programa deportivo nocturno de la cadena Cope, pasó por Cáceres el jueves dejando una impronta de espectáculo y cercanía entre las cientos de personas --sobre todo jóvenes-- que abarrotaron el Palacio de Congresos. Hubo mucho show , imitaciones, canciones y juegos, pero no faltaron las noticias. Un equipo de 30 personas permitió que todo saliese poco menos que perfecto.
El ambiente fue enfervorecido, sobre todo cuando casi todo el público coreó el himno del Cacereño liderado por Vitorio Duque, el otro Luis Aragonés . La presentación corrió a cargo de Juan Antonio Alcalá, que contó con el apoyo de Juanma Castaño, Joseba Larrañaga y los vitoreadísimos Tomás Guasch y Pepe Domingo Castaño, este con su habitual reflexión poética final. Todos fueron tratados casi como estrellas del rock, pero muy agradecidos a una ciudad y una región a las que elogiaron hasta la saciedad. Paco González y Manolo Lama intervinieron por teléfono.
El menú fue de lujo. Fueron entrevistados telefónicamente dos de los deportistas extremeños más conocidos de la historia, el baloncestista José Manuel Calderón y el exfutbolista Fernando Morientes, colaborador de la cadena. Ninguno de ellos se cansó de expresar su cariño por la comunidad autónoma en la que nacieron.
En el palacio estuvieron presentes Albert Ferri y Manuel Parra, entrenador y capitán del Sporting Villanueva, que contaron el drama diario que viven. Y como por allí proliferaron los políticos, algún paso pareció darse para alcanzar una solución. José Antonio Monago expresó la indignación de la Junta por la gestión de la nueva directiva del club. El presidente tuvo un aparte con Ferri. "Tenemos que arreglarlo. Es una vergüenza que esto esté sucediendo aquí", dijo.
También acudieron el presidente de la asamblea, Fernando Manzano; la alcaldesa de Cáceres, Elena Nevado (la excusa para el programa era el 25 aniversario de Cáceres como patrimonio de la humanidad), y el presidente de la diputación, Laureano León. El toque artístico lo pusieron el grupo El Desván del Duende --con su mítica Macetas de colores -- y el mago Jorge Luengo.
