CAJASOL QALAT: Aguilar (4), Dionisio Gómez (20), César Bravo (7), Bonhome (11), Ville Kaunisto (8) -cinco inicial-, Casanova (11), Michel Diouf (6), Suka (2) y Santos (0).

CACERES 2016: José María Panadero (17), Sidao Santana (8), Juan Sanguino (10), Luis Felipe Gruber (9) y Ricardo Busciglio (0) -cinco inicial-, Kelvin Peña (12), David Patten (4), Alberto Aspe (8) y Félix Ortiz (6).

ARBITROS: Bey Silva y Marín Rodríguez . Eliminaron por cinco faltas al visitante Sidao Santana.

MARCADOR POR CUARTOS: 23-14, 37-34 (descanso), 52-54 y 69-74 (final).

El Cáceres 2016 logró su segunda victoria de la temporada en un partido que se le había puesto muy cuesta arriba a la conclusión del primer cuarto (23-14), pero los puntos de Panadero (17) y Peña (en los compases finales) y los siete rechaces de Gruber (siete en total) explican el 69-74. Los 20 puntos de Dionisio Gómez no bastaron para que el triunfo se quedara en Sevilla.

Los primeros 10 minutos del choque tuvieron un claro e incontestable color sevillano, gracias a un parcial de salida de 11-2. Y es el 23-14 con el que se llegó a la conclusión del primer cuarto explica bien a las claras lo que estaba sucediendo sobre el parquet.

Gómez, en su debut oficial, convertía a Qalat Cajasol en un equipo poco menos que insuperable en ambos tableros. El técnico del Cáceres 2016, Fede Pozuelo, ordenó cambiar la defensa al comienzo del segundo, circunstancia que le permitió meterse en el choque. Primero, merced a un parcial inicial de 2-8. Luego, tras un 0-7 entre los minutos 17 y 20. Así, se llegaba al descanso con todo por decidir. Un 37-34 que permitía al cuadro extremeño soñar con la primera victoria de la temporada lejos de su pabellón.

GRUBER, CLAVE OTRA VEZ Al igual que pasó en la primera jornada, Luis Felipe Gruber tenía mucho que ver en esta posibilidad. Mucho mejor resultó la puesta en escena de los cacereños tras la reanudación.

Los locales perdían demasiados balones, circunstancia que provocó un parcial de 2-7 que le daba la vuelta al electrónico. Pero Cajasol no dio su brazo a torcer, volviendo a tomar el mando de las operaciones a cinco minutos para la conclusión del tercer acto (parcial de 5-0 en poco menos de 45 segundos).

Y cuando todo hacía indicar que los hispalenses encararían el último y definitivo cuarto en ventaja, triplazo sobre la bocina del cuadro cacereño, para alcanzar el 52-54 del minuto 30.

En el período definitivo, igualdad máxima (empate a 65 a menos de tres minutos para la conclusión). Pero un par de rebotes ofensivos le dieron una ventaja que parecía definitiva para los visitantes (65-69, minuto 38).

En esa recta final, los cacereños supieron mantener la calma y acertaron desde la línea de personal para conseguir lo que es su segunda victoria en otros tantos encuentros.