El Cáceres estuvo muy cerca de sumar su cuarta victoria de la temporada y luchó hasta los instantes finales por ello, pero el Caja San Fernando supo jugar mejor las últimas posesiones y se llevó un triunfo, el tercero consecutivo por primera vez en la campaña, con el que se asienta en la zona noble. Los visitantes tendrán que intentar enmedarse en las próximas semanas, aunque no lo tendrán fácil ya que su calendario recoge a rivales sumamente complicados, como el Tau Vitoria el domingo.

La formación extremeña, que se presentó en Sevilla con el problema añadido de las molestias físicas del pívot Juan Antonio Orenga y del base Ferrán López, ambos en el banquillo, salió a la cancha con Mike Hansen como director del juego y con Ariel Eslava y Hurl Beechum en la misión de hacer daño con los lanzamientos exteriores. La rotación se reducía así a ocho jugadores, varios de los cuales, para mayor contratiempo, no estuvieron a su mejor nivel en cuanto a acierto.

BUEN ARRANQUE

En principio, el planteamiento le fue bien al equipo que dirige el canario Manuel Hussein, que se mostró en la cancha muy concentrado en todas las facetas del juego, con una gran defensa al hombre y con buenas circulaciones de balón en el ataque para encontrar al jugador con mejores opciones de tiro. Hasta Bobby Martin, seriamente discutido en las últimas semanas en Cáceres, rendía en ataque, aunque en defensa no podía con Francisco Elson, gran dominador de los tableros durante la primera mitad.

El Caja San Fernando nunca supo salir de la defensa cacereña y además no estuvo tan efectivo en el tiro exterior, por lo que el rival llevó el peso del juego y el resultado a favor todo el primer cuarto.

El Cáceres llegó a tener una máxima ventaja de ocho puntos (17-25), que quedó reducida a la conclusión de los primeros diez minutos en cinco (22-27) por un par de acciones concretas y desafortunadas.

En el segundo cuarto, el equipo visitante mantuvo su línea, con Deon Thomas y Martin muy efectivos bajo los tableros y en una línea de juego muy regular, sobre todo el primero de ellos, quien vio la canasta con mucha facilidad. Además, logró anular al exjugador del Cáceres Danya Abrams durante muchos minutos del choque.

Gustavo Aranzana no encontró su cinco ideal, pese a rotar mucho el banquillo, y vio como su equipo tenía una desventaja de hasta once puntos (22-33) que empezaba a inquietar. El Caja San Fernando no estuvo bien en el juego interior, con Abrams sin levantar cabeza (0/7 en el primer tiempo), pero Francisco Elson mantuvo el tipo bajo los tableros y eso motivó que el Cáceres no pasara de esos once puntos de ventaja y que incluso se redujeran.

ELSON MANDA

La aportación de Elson (mejor jugador de la Liga ACB en el pasado noviembre) fue dan decisiva que hizo reaccionar a sus compañeros y en los últimos instantes del segundo cuarto le dieron la vuelta al marcador, hasta el punto de irse al descanso con ventaja (40-39).

El equipo de Hussein no se desesperó por la reacción de los de Aranzana y en la segunda parte se mantuvieron firmes en la defensa y con una acertada rotación a la hora de coger la responsabilidad en el tiro.

Con ello evitó que el Caja San Fernando se despegase en el marcador y que pudiera desarrollar otro juego que no fuera apostar por el trabajo de Elson y el acierto desde el exterior de Slanina (53-53, m.16).

FINAL SIN ACIERTO

Al final del tercer cuarto se llegó con un equilibrio de fuerzas entre ambos equipos y también con el marcador igualado (57-57), por lo que se entró en los últimos diez minutos de encuentro con todo por resolver y sin que estuviera muy claro quien se llevaría el partido.

Los sevillanos iniciaron el decisivo cuarto más finos, con una fuerte defensa que le sirvió para recuperar balones y poner a su favor la máxima que hasta el momento habían obtenido, de seis puntos (63-57, m.33).

El Cáceres nunca se quiso dar por perdido, después del gran esfuerzo hecho durante todo el encuentro, y a falta de algo menos de cinco minutos para la conclusión volvió al marcador favorable (69-72), pero en los últimos instantes Donatas Slanina estuvo muy efectivo en los lanzamientos libres, lo que, unido a la fuerte presión de su equipo, hizo que los cacereños salieran derrotados. El cansancio había repercutido en esos instantes finales.