CAFES CANDELAS BREOGAN: Pep Ortega (9), John Ofoegbu (0), Alex López (12), Sergio Llorente (8), Nunes (7). También jugaron: Mamadou Samb (7), Fede Ucles (7), Devin Wright (0), Osvaldas Matulionis (24) y Nikola Rakocevic (3).

CACERES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD: Marco (0), Parejo (8), Frutos (3), Jakstas (16), Serrano (9). También jugaron: Rigo (3), Corrales (0), Toledo (2), Thomas (10), Sergio Pérez (5).

MARCADOR POR CUARTO: 19-16, 37-23 --descanso-- 59-40 y 77-56 --final--

ARBITROS: Morales Ruíz y González Cuervo. Sin eliminados.

Cafés Candelas Breogán y Cáceres Patrimonio de la Humanidad, dos rivales parejos en la clasificatoria y apurando sus últimas opciones de estar en el playoff , ofrecieron un partido desigual en el que los extremeños no estuvieron nada acertados (77-56). El primer cuarto fue el más igualado de todos, pero a partir del segundo y cuando el juego se abrió más allá de las pinturas, el equipo lucense mostró mucha más puntería. En el tercero los extremeños buscaron la remontada, pero aunque jugaron un poco mejor volvieron a ceder renta, por lo que el cuarto sobró por completo.

El choque comenzó contenido y tenso, con los bases imponiendo un ritmo de juego pausado y muy meditado que trataba de evitar errores innecesarios. Así las cosas, gran parte de este cuarto se jugaría en las pinturas, con gran protagonismo de los pivots locales John Ofoegbu y Ortega así como de de sus respectivas parejas de baile, Serrano y Jakstas, que monopolizaron casi todos los primeros puntos del partido. Con el paso de los minutos brillarían el local Ortega y el visitante Jakstas, que además de anotar mucho minimizó a su marca. Todo estaba igualado hasta que dos triples consecutivos de Cáceres, de Parejo y Frutos, colocaban el 10-14 a falta de cuatro y obligaban al banquillo local a agotar un tiempo muerto. De ahí al final, sin apenas faltas por parte de nadie, el encuentro se abrió más pero las diferencias fueron mínimas (19-16).

Dos pasos consecutivos de los extremeños, un par de despistes y dos triples seguidos de los lucenses, de Nunes y Matulionis, colocaron un nueva máxima nada más iniciarse el segundo cuarto (25-16). Cáceres apretó los dientes en defensa y durante muchos minutos secó a su oponente, pero en ataque se mostró romo y la diferencia no se rebajaba. Dos canastas seguidas del veterano Matulionis, con otro triple incluído, obligaron al técnico cacereño a parar el choque, 32-20 a falta de cuatro para el descanso. Pero el juego no mejoró, seguía en fase de nervios y errores con Rigo especialmente desacertado.

A la vuelta de vestuarios Cáceres siguió mostrándose errático en sus ataques, todo ello ante un Breogán que por entonces tampoco jugaba bien pero que con el marcador a favor se sentía menos penalizado y mantenía el dominio en el luminoso. En un intercambio de idas y venidas sin acierto, el equipo lucense salió mejor parado y el Cáceres cedió finalmente (59-40). El último cuarto sobró por completo con dos equipos que dejaron pasar el tiempo.