CACERES - 68: José Antonio Marco (4), Garfield Blair (11), Luis Parejo (16), Javier Carter (12), Kelsey Williams (13) --cinco inicial--, José Antonio Medina (3), Miguel Angel Conejero (2), Carlos Ferreiro, Juanma Ruiz (5), Masour Kasse (2).

EL BULEVAR AVILA - 70: Guillermo Justo (15), Adrián Méndez (7), Carles Marzo (10), Peter Simek (7), Fernando Fernández (6) --cinco inicial--, Adriá Camino (2), Guillermo Miguel, José Manuel Bermejo, Arturo Fernández (4), Juan Francisco Herrero (9), Michael Ryan (7).

ARBITROS: Francisco Rastroyo y Conrado Martín. Eliminado Juan Francisco Herrero.

MARCADOR POR CUARTOS: 24-21, 40-35 --descanso--, 55-54 y 68-70 --final--.

INCIDENCIAS: Se guardó un minuto de silencio por la muerte de Silvestre Montes.

Este Cáceres ya tiene una seña de identidad: su capacidad atlética. Ayer, en el partido de presentación ante El Bulevar Avila, evidenció esa condición en un encuentro en el que terminó perdiendo ante el Bulevar Avila (68-70), un rival de su rango y categoría que aprovechó el mal tramo final de los locales para anotarse una victoria anecdótica a efectos prácticos.

Al Cáceres se le intuyen buenas maneras, jugadores fibrosos y espíritu de lucha, pero también lagunas, especialmente en el aspecto mental. "No jugamos a baloncesto, no volvemos para atrás". Los pocos espectadores que estuvieron en el Multiusos --preocupante síntoma-- escucharon a Ñete Bohigas dirigirse así a sus jugadores durante un tiempo muerto. Restaban 5:43 para la finalización y el Avila le había dado la vuelta al electrónico (60-63) después de que durante casi todo el resto lo dominaran los cacereños.

Los bases, Marco y Medina, especialmente el primero, no hicieron lo que se les supone; Garfiel Blair estuvo intermitente, con destellos de gran clase para la LEB Plata; Parejo y Ruiz aportaron calidad en las alas, sobre todo el primero; los interiores, muchos muelles y poca cabeza en ataque. El dibujo del Cáceres 2013-2014 puede prometer espectáculo, pero aún le resta mucho por mejorar porque su ensamble como bloque se intuye todavía una entelequia.

Le falta conjunción a este grupo de jugadores muchos de ellos muy físicos, pero que seguro ganará muchos partidos en la tercera categoría del basket nacional. De momento, las lecturas son contradictorias porque ayer le pudo un Avila que, aun habiendo ganado, tiene muchos menos argumentos, lo cual no deja de ser otro dato de sesudo e intranquilizador estudio. La LEB Plata ya ha aterrizado.