¿Qué hubiese pasado si el Cáceres hubiese continuado en la ACB con el actual ´status quo´ televisivo? El descenso hace apenas 17 meses ofrece un ejercicio de posibilismo que lleva a una conclusión difícilmente discutible: el club extremeño hubiese visto muy seriamente agravados unos problemas económicos que le estrangularon lentamente desde 1998 al 2003, cuando la sociedad anónima deportiva que lo albergaba entró en quiebra.

Y es que las cifras resultan tozudas: durante sus once años en la Liga ACB, el Cáceres ingresó aproximadamente un cuarto de su presupuesto en derechos televisivos y de participación en la competición, lo que venía a ser como promedio unos 600.000 euros (100 millones de pesetas de entonces). En el mejor de los casos, esta cantidad se reducirá a un tercio para los equipos de la zona media-baja de la clasificación. Esa drástica disminución hubiese sido muy difícil de resistir.

En la LEB estos problemas no existen. Los clubs ya saben que difícilmente van a ver un euro del dinero que percibe la Federación Española de TVE por ceder los derechos de un partido por semana para el canal temático Teledeporte.