Si mira al pasado, el Cáceres Patrimonio de la Humanidad puede ser optimista, pese a un arranque de competición en el que ha igualado los peores resultados de su historia a estas alturas. Y es que sus dos victorias y cinco derrotas actuales son las mismas que se contabilizaban en la temporada 2011-12. Sin embargo, aquel decimosexto puesto en la LEB Oro (uno mejor que actualmente) se acabó convirtiendo al final de la campaña en la mejor clasificación hasta entonces: quintos tras perder las semifinales en cinco partidos ante el Melilla.
Precisamente en la ciudad autónoma se produjo el martes el último revés de los verdinegros, un 79-72 algo engañoso porque las diferencias llegaron a superar los 20 puntos. Tras dos encuentros exitosos, el equipo volvió a sufrir un retroceso. El domingo (12.00 horas, Multiusos) intentará relanzarse, pero no lo tendrá fácil ante el líder, el Leyma Coruña, que lleva un estupendo 7-1.
Cambios
La transformación de la temporada 2011-12 no se produjo porque sí. Con Gustavo Aranzana en el banquillo, el inicio resultó decepcionante y se cobró la cabeza del norteamericano Carleton Scott, que en principio fue sustituido por Drake Bouldin. Después llegaría una reforma más radical de la plantilla con las salidas del propio Bouldin y de Asier Zengotitabengoa, descontento con su papel, y los fichajes de Sergio Olmos y Francis Sánchez, que volvía así al equipo.
Alrededor del bloque nacional se consiguió una agónica clasificación para los playoffs (cuatro victorias consecutivas para amarrar la novena plaza en la liga regular. La sorpresa fue descomunal en la primera ronda venciendo al Ford Burgos en el quinto partido a domicilio. Después, en la serie contra el Melilla, estuvo por delante dos veces (1-0 y 2-1) y se vio perjudicado por una polémica falta personal en contra en los últimos segundos del cuarto encuentro. José Marco, actualmente en el Cáceres y entonces en el rival, estuvo cerca de la jugada y ha reconocido en varias ocasiones que los extremeños tenían razón en sus protestas.
Ahora el mensaje oficial es que no habrá cambios en la actual plantilla, por mucho que haya jugadores que no están aportando lo esperado. Algunos dedos empiezan a apuntar a Zygimantas Riauka (4,6 puntos y 4 rebotes en 18 minutos en pista). Nadie duda de que, si hay dinero, lo que necesita el equipo es reforzar su juego interior, aunque al menos en Melilla se produjo la buena noticia de los 15 rebotes recogidos por Sandi Marcius (10 ofensivos, récord en la historia del club).
Los demás
Normalmente este nuevo Cáceres, que este año cumple diez años en competición oficial, no ha sido un equipo que empiece bien. De sus nueve campañas de existencia, en cuatro de ellas llevaba un balance positivo después de siete encuentros jugados, pero solamente uno de estos casos se produjo en LEB Oro. Fue en la 2010-11 en un inicio de ensueño y también con Aranzana como técnico: marchaba tercero con un brillantísimo 6-1, las mismas cifras que en la 2014-15, cuando se consiguió el ascenso. También en LEB Plata se produjeron los 4-3 de la 2007-08 (era tercero y a Fede Pozuelo le quedaba apenas un mes para ser destituido) y la 2013-14 (octavo, con Ñete Bohigas).
Todo lo demás fueron 3-4 en la segunda categoría nacional: 2008-09 (noveno, Piti Hurtado), 2009-10 (duodécimo, también con Hurtado, que estaba a punto de dejar su puesto), 2012-13 (décimo, Carlos Frade) y 2015-16 (séptimo, Bohigas de nuevo). Es curioso resaltar que en estas dos últimas campañas el equipo también fue de menos a más y logró el acceso a las eliminatorias por el ascenso.
