Con el estreno liguero todavía lejano en el horizonte (6 de octubre en Prat), el Cáceres juega esta noche en pista con su primer amistoso. Será en Sevilla ante el filial del Cajasol, que milita en la Liga EBA (20.30 horas). En teoría, un choque de una exigencia no muy alta para comprobar los primeros progresos del conjunto que esta temporada 2013-14 ha elegido regresar a la LEB Plata de la mano de Ñete Bohigas.

El entrenador, que ha dejado bajo la dirección de Mario Segalás los entrenamientos de la última semana por un viaje personal que ya tenía concertado desde antes de firmar contrato con el club, espera sacar las primeras conclusiones prácticas entre lo que ocurra hoy y el próximo domingo. Ese día está programada otra cita de preparación frente a las viejas glorias del Cacaolat Cáceres (Torneo Diputación) en Brozas (21.00 horas).

ESPERANDO TODAVIA Sin embargo, lo hará con la plantilla todavía incompleta. Y eso que ayer fue recibido en el entrenamiento el último fichaje, Mansour Kasse, que aceleró su llegada a Cáceres para incorporarse al equipo. Está casi asegurada su participación en el choque de Sevilla, aunque sea de modo simbólico.

Más habrá que esperar para tener a Garfield Blair, que ha concluido su participación con la selección de Jamaica en el Premundial con noticias ambiguas para su nuevo club: sus buenas actuaciones han elevado la sensación de que se ha acertado de pleno con su fichaje, aunque las victorias de su equipo harán que se incorpore con dos semanas de retraso. Se le aguarda el lunes.

El Cáceres estará hoy con nueve profesionales, por lo que contará con los juniors que están ayudando en los entrenamientos para poder completar el equipo.

Por otra parte, en los últimos días se ha cerrado la cesión de Filip Kzenevic al Gandía, de EBA. El pívot montenegrino, de 19 años, lleva dos años en Cáceres y le quedan apenas unos meses para poder jugar sin ocupar plaza de extranjero. Hay confianza en su progresión.