No tiene problema en afirmar Roberto Blanco que la visita este viernes del Covirán Granada al Multiusos (21.00 horas) es el partido más importante de los que han jugado hasta ahora. «Igual esa palabra solo la había utilizado para el día de Coruña y esta semana la he vuelto a emplear; es un partido importante, ellos [los jugadores] deben saberlo, es un partido que nos hace mucha falta», reconoce el entrenador del Cáceres Patrimonio de la Humanidad, que espera cortar una mala racha de cuatro derrotas seguidas y empezar el 2020 con sensaciones positivas.

Dos victorias separan al Cáceres de los puestos de descenso y una de su rival de esta noche, competidor directo en la lucha por la permanencia. Un triunfo de los verdinegros les permitiría dar un importante paso al frente en esa pelea, «pero no sería definitivo», recuerda blanco. Tampoco perder, por lo que el técnico placentino huye de dramatismo. «Si perdemos no se acaba el mundo; iremos a ganar a San Sebastián y si lo conseguimos se habrá hecho una gran primera vuelta. Si perdemos estaremos dentro de los guarismos lógicos para el objetivo inicial, que es mantenernos. No será un éxito, pero tampoco un fracaso».

Inicia el Cáceres el 2020 tras cuatro derrotas seguidas (todos los partidos del mes de diciembre), las tres primeras en finales apretados y la última el pasado domingo en Coruña, donde los cacereños no hicieron un gran partido en ataque y cometieron en defensa «algún error grave de concentración». Nada que no se pueda subsanar, dice el preparador, optimista por las ganas que ha visto en sus jugadores para subsanar este bache y un deseo, iniciar el año con una victoria.

SER OPTIMISTAS / No hay dudas en el Cáceres y no cree Blanco que las cuatro últimas derrotas deban pesar en sus jugadores. Apunta a la necesidad de ser optimista («equipos que están por debajo en la clasificación lo son») porque «estamos haciendo un buen trabajo más allá de esas cuatro derrotas».

Es el Granada un rival que llega al Multiusos con muchas dudas (ha perdido los dos últimos compromisos), pero el Cáceres espera un partido duro. «Es un equipazo, pero está en proceso de conjunción», explica Blanco, que destaca su «increible potencial» y a jugadores como Diego Kapelan, veteranos como Guille Rubio y el exverdinegro Sergio Olmos, «que saben bien lo que hay que ahcer en la pintura», y a Josep Pérez, «que está en plena madurez, está en esos años donde desarrolla más abiertamente su baloncesto».

AÚN SIN REFUERZO / Sigue el Cáceres sin sustituto de Kosta Jankovic, que se marchó el 16 de diciembre, pero cuya salida se empezó a trabajar hace dos meses. «Es algo que está en manos de la directiva», dijo Blanco, que en el buen humor que le caracteriza dijo que le pide «al 2020 ese 4 que nos ayude». Sobre la mesa hay varios nombres, los mismos que hace una semana. Más que un problema económico, añadió, es encontrar el jugador adecuado en estos momentos. «Creo que estamos cargando de mucha presión a Sylvester [Berg], que lo está haciendo sensacional, pero está asumiendo una responsabilidad que todavía no le toca. Esto temporalmente vale, ayuda, pero no es el 4 que queremos ni que estamos construyendo. Espero que llegue lo antes posible, nos hace falta», añadió el técnico, que por lo demás podrá contar con todos los jugadores para el duelo de esta noche.