Último ensayo para el Cáceres y, enfrente, uno de los gallitos de la LEB Oro. El grupo de Ñete Bohigas -al menos los que estén disponibles- y el Melilla se enfrentan en el XXIII Trofeo Cáceres Patrimonio de la Humanidad (pabellón Multiusos, 21.00 horas), última prueba de los verdinegros antes del estreno ligero del próximo viernes ante el Quesos Cerrato Palencia, otro de los aspirantes al ascenso.

Sin Marcius, otra vez, pendientes de Ragnar Nathanaelsson y también de Carlos Toledo (habrá que ver su evolución a lo largo del día), Bohigas asegura que necesita, sobre todo, «salud» para sus chicos. «Sandy no ha hecho ningún entrenamiento, José Marco no está a un tanto por ciento muy alto... Todo se está haciendo cuesta arriba, porque está siendo así desde el principio» de la pretemporada, se lamenta el preparador verdinegro.

El de hoy será un buen test «ante un equipazo», como lo define Bohigas, un ensayo general en el que espera, con las taras con las que vuelve a presentarse en la pista, ser al menos «capaces de competir y estar a su nivel». Como el martes ante el Oporto, cuando el técnico acabó «encantado con el equipo». «Ha sido, por ahora, el momento donde he visto la evolución del grupo. Pero queda camino por recorrer».

Ese camino es el de la próxima semana, la última antes de iniciar la competición en la LEB Oro. Y para esos días Bohigas tiene una única petición: «Quiero a todo mi gente entrenando, por lo menos una semana con continuidad. Si no, es muy complicado».

La campaña que está a punto de comenzar será «dura», aunque no renuncia a nada. «Tenemos la sensación de que trabajando duro podemos llegar a unas metas parecidas a las del año pasado. El play off sería otro éxito».

Respecto a JC Fuller, Bohigas reconoció que «lo más normal es que se quede». Las estrecheces económicas del club invitan a esa postura. «Cumple una serie de requisitos que a la plantilla le vienen bien», añadió el técnico.

baloncesto alegre / Guillermo Corrales, que asegura sentirse muy bien y con ganas de iniciar un curso en el que está llamado a asumir más responsabilidades en la cancha, explica «Ñete quiere que hagamos un baloncesto alegre, que corramos y que defendamos, que seamos fuertes, sobre todo en casa». En cuanto al duelo de hoy dice que enfrentarse al Melilla puede ser una buena piedra de toque para calibrar lo que pueden encontrarse el próximo viernes, ya que Palencia es un equipo similar. H