FORD BURGOS: Chris Hernández (6), Zach Morley (15), Chus Castro (8), Manu Gómez (11), Jason Blair (6) --quinteto inicial-- Iván Corrales (8),Peter Lorant (7), Alberto Miguel (6).

CACERES 2016: Drew Naymick (11), Randy Holcomb (10), Francis Sánchez (21), Alex González (6), Lucio Angulo (20) -quinteto inicial- Perico Sala (-), Gio Dedas (6), Diego Guaita (2), Xavi Forcada (0), Roger Fornas (1).

MARCADOR POR CUARTOS: 11-32, 24-44, 44-56 y 68-77.

ARBITROS: Morales (Madrid) y López (Andalucía). Sin eliminados.

INCIDENCIAS: Decimotercera jornada.

Al Cáceres 2016 le bastó un cuarto para dejar el partido sentenciado. El 11-32 que reflejó el marcador al término del acto inaugural ofrece poco margen a la imaginación o la excusa.

Al Ford Burgos le tocó recibir. Hasta en el DNI. Un caos del que sacó provecho un rival esplendoroso en su baloncesto y letal ante el constante favor local y que hizo gala de una gran dosis de paciencia para ganar.

El 2-9 de salida no hacía presagiar nada bueno. Los de Casadevall salieron blandos en defensa y torpes en ataque. Lucio Angulo parecía un veinteañero y las metralletas de Francis Sánchez y Alex González hicieron el resto. Burgos se instaló en la locura, en la sinrazón y el agujero se abrió hasta el 6-24. ¿Qué más podía suceder? Ver al estandarte ofensivo, Zach Morley, darse cabezazos contra la defensa extremeña era síntoma inequívoco de que los locales habían tocado fondo. Realmente lo hicieron cuando los de Aranzana se fueron a la máxima (8-30).

El equipo burgalés no estaba para alardes. Bastante tenía con agarrarse a la pista, aunque en el segundo cuarto, al menos, frenó la sangría apoyado en una defensa zonal que no tuvo continuidad en la canasta verdinegra. Un quiero y no puedo en el que, a pesar de todo,Burgos seguía agarrado con fuerza al finísimo hilo que todavía le unía al partido.

Solo Manu Gómez parecía enganchado. Insuficiente en una cruzada en la que tampoco bastó el coraje de Lorant, con Chris Hernández (-4 de valoración), Morley, Castro y Miguel fuera de cobertura. La borrachera inicial de Cáceres dio pie a un cuentagotas en el que tenía las de ganar. Los locales consiguieron bajar la barrera de los 20 en varias ocasiones, pero cada halo de luz encontraba rápida respuesta verdinegra para llegar al descanso con un esclarecedor 24-44.

SUSTO Así entró una segunda parte en la que Autocid tenía la clara táctica a seguir: morir matando. Un 4-0 de salida y la tercera de Naymick alimentaban el alma. Había lugar para la esperanza. Sin estridencias. Sólo con energías y criterio en su ímpetu. Cada mordisco desesperado era una razón más para cargarse de razones y, una vez que los azulones bajaron de los 15 (40-54), comenzó otro envite. Los de Casadevall se acercaron hasta el 44-56 en el rush final de la tercera manga y todo era posible.

Dos triples de Alberto Miguel y una canasta de Blair provocaron el estallido del público. Los locales estaban en el partido con el 52-58 y todo un mundo por disputar. Subidón que hacía pensar en una noche mágica, convertido en un leve suspiro antes de hincar la rodilla de forma definitiva. Los visitantes rebajaron los humos de El Plantío con tres bofetadas sonoras. Mortales. Tres aciertos exteriores consecutivos enfriaron el alma de un Burgos roto en mil pedazos con el 0-9 de parcial que echaba por tierra el esfuerzo y el partido.

A pesar del nuevo golpe, Burgos siguió luchando, sabedor de su suerte final. Aún le quedaba la épica. Por aquello de aferrarse a algo en los últimos cuatro minutos (57-69). Pero allí estaba Francis Sánchez, impresionante, para poner el lazo a la victoria extremeña (68-77).

Burgos 68 - Cáceres 2016 77

Vigo 76 - Leche Río Breogán 63

Ourense 81 - Tarragona 72

Palencia 69 - CAI Zaragoza 73

Cornellá 79 - Girona 90

La Laguna 82 - Melilla 87

La Palma 74 - Tenerife Rural 67

León-ViveMenorcahoy

Mallorca-Clínicas Rincónmañana