El dato es escalofriante: de las 21 jornadas que se llevan disputadas de la LEB Oro, el Cáceres Patrimonio de la Humanidad solamente ha podido disponer de los diez profesionales de su primera plantilla en siete de ellos.

Las sucesivas lesiones de varios de sus jugadores han impedido contar a Ñete Bohigas con la totalidad de su grupo en encuentros y entrenamientos muy a menudo. Aunque un dato curioso es que el balance cuando no ha habido bajas ha sido de tres victorias y cuatro derrotas, mientras que cuando sí se han producido se han igualado los partidos ganados y perdidos (siete).

Pol Olivier faltó durante siete encuentros (jornada 5 a la 12). Reapareció ante el Prat en la 13, pero a continuación Luis Parejo y Niko Rakocevic no pudieron jugar en Lleida. Hubo una tregua de dos encuentros (Araberri y Melilla en casa), pero a continuación Rolandas Jakstas se lesionó, lo mismo que Guille Corrales en Castellón. Mañana ante el Breogán volverá seguro el base, algo que todavía tiene que confirmarse en el caso del lituano.

En los últimos encuentros ha habido más problemas: ante el Barcelona B faltaron Warren Ward y Parejo y en la pista del Huesca fue el alero canadiense quien se lesionó para un mínimo de cuatro o cinco semanas, lo que le hará perderse varios partidos. Nada a lo que este equipo no esté ya acostumbrado.