Hace cuatro días, el Cáceres Patrimonio de la Humanidad solo tenía un par de jugadores confirmados. Hoy, 5 de agosto, ya puede asegurar que ha cerrado a más de media plantilla. En medio de una cascada de anuncios, la semana se cerró ayer con el de la renovación de Luis Parejo, el capitán, máximo anotador de su historia y, probablemente, hombre más carismático en los últimos años.

La 2019-20 será su séptima temporada como verdinegro, las cinco últimas en LEB Oro. Nadie desde la refundación de la entidad puede presumir de atesorar ese dato. Y, si se rebusca en el extinto Cáceres CB, esa cifra únicamente la consiguieron tres leyendas como Toni Pedrera, Enrique Fernández y José Antonio Paraíso.

«Vamos a seguir disfrutando juntos y peleando juntos», dijo Parejo en un vídeo distribuido por el Cáceres orientado a sus aficionados. Se une así a los bases Ricardo Úriz y Aitor Zubizarreta, el escolta Niko Rakocevic y los ala-pívots Kosta Jankovic y Rubén Bilbao.

No ha faltado suspense en la continuidad de Parejo, que llegó a dudar cuando se le pidió que renunciase a parte del dinero que tenía firmado para esta temporada en el contrato que suscribió en 2018. Frunció el ceño, pero ha acabado aceptando, en parte por su situación personal --es feliz en Cáceres y en el Multiusos--, en parte porque, cuando se le presentó la disyuntiva, ya tenía difícil posicionarse en el mercado.

Falta todavía casi la otra mitad de la plantilla. Existen conversaciones avanzadas con un buen puñado de jugadores, pero por ahora nadie da nombres ahí dentro. Se supone que al menos tres de ellos tendrán reservado un papel preponderante: un alero alto y dos interiores llamados a estar en la primera rotación. A ellos irá reservada una buena parte del presupuesto, muy similar al de la pasada campaña.

En principio, entre los diez componentes profesionales no estará Guille Corrales, salvo giro imprevisto de los acontecimientos. Como publicó ayer este diario, el base, que lleva cinco años en el equipo, ha ofrecido una abultada rebaja de su salario, pero la respuesta que ha recibido es que no entra en los planes de futuro de la entidad. Sin embargo, todavía guarda la esperanza de tener un hueco, aunque sea al final del banquillo.