Cáceres 2016-Kics Ciudad de Vigo, mañana a las 21.00 horas en el Multiusos. Las clubs de las dos ciudades no se han enfrentado nunca en una pista de baloncesto, pero guardan en común una historia que para unos es muy trascendente y para otros algo más irrelevante. Ocurrió hace 18 años y medio, en el verano de 1991 y fue un momento que cambió la vida de muchos en Cáceres. Fue una negociación entre dos entidades que ya no existen como tal y que terminó con la venta de una plaza en Primera División --la actual LEB Oro-- del Bosco de Vigo al Cáceres CB. Para los extremeños supuso el primer paso para conseguir uno de los mayores éxitos de la historia del deporte regional: el ascenso a la Liga ACB el 10 de mayo de 1992.

Las hemerotecas cuentan que José María Bermejo, presidente del Cáceres CB, el gerente, Santos Chaso, y el entonces alcalde de la ciudad, Carlos Sánchez Polo, cerraron el pacto con los directivos del Bosco en Madrid un 16 de julio de 1991, en un restaurante --cómo no, gallego-- de la capital llamado O´Xeito. Los vigueses no podían afrontar los gastos de la Primera División y los cacereños llevaban intentando el ascenso varios años, sin éxito. 12 millones de pesetas (72.000 euros actuales) fue el precio de un traspaso de derechos, una inversión que con el tiempo se revelaría rentabilísima y en la que el empresario Manuel Ollero (Tambo) fue fundamental.

Muchas cosas han sucedido desde entonces, pero Cáceres y Vigo no han coincidido en ninguna categoría. Ni por supuesto en ACB ni en LEB Plata, a la que el nuevo Cáceres 2016 llegó tras otra compra de derechos, en este caso al Lliria. Pero este año el Ciudad de Vigo, que llevaba un par de años entre LEB Bronce y LEB Plata, consiguió un puesto en Oro bien entrado el verano, de milagro (cuestiones económicas). La precipitación y apreturas a la hora de construir la plantilla le están pasando factura y es penúltimo con solo dos victorias. Sus interioridades las conoce bien Perico Sala, que hizo la pretemporada con ellos antes de firmar con el Cáceres.