Existe una competición oficiosa dentro de la LEB Plata: la que mantienen los dos equipos extremeños. Hace pocas semanas, parecía que el Plasencia Galco tenía totalmente asegurado terminar por delante del Cáceres 2016 en la liga regular, pero todo ha cambiado en las últimas jornadas. El conjunto de Piti Hurtado, en plena racha de victorias y acierto, se ha colocado a un solo triunfo del de Juan Pablo Márquez, que no ha podido mantener su altísimo nivel de inicio de temporada y ahora genera críticas entre una parte de la afición.

Hace solo seis jornadas, el hueco era de cinco victorias y las sensaciones eran completamente diferentes. El Cáceres 2016 empezaba a reconstruir un equipo que ahora se está mostrando temible, mientras que el Plasencia caminaba tranquilo e incluso miraba de reojo a las posiciones más altas. En cualquier caso, todo parece indicar que ambos entrarán en los play offs por el ascenso. Los dos dan por perdida la primera plaza de la liga regular que da derecho a subir directamente.

Resulta innegable que lo que ocurre en el otro equipo de la provincia se estudia con detalle en el bando contrario . Aunque las relaciones institucionales son bastante buenas --exceptuando algún pequeño detalle--, existe el indisimulado deseo en ambas partes de acabar por encima sea como sea.

Podría decirse que Plasencia y Cáceres ejercen de vasos comunicantes y que a veces la crisis coge la recién acabada A-66. Ninguna victoria se ha celebrado tanto en el Multiusos esta temporada como la que los cacereños consiguieron el 11 de enero contra sus vecinos (91-72). El 9 de mayo ambos volverán a medirse, esta vez en la Bombonera , en la penúltima jornada de la temporada regular. Quizás esa noche haya mucho en juego... sobre todo, la mini liga extremeña.