Los récords de Alberto Contador parece que no tengan límite. A los 28 años el corredor madrileño se encuentra en el camino de convertirse en uno de los ciclistas con más grandes rondas por etapas en su palmarés. Posiblemente, los registros de Eddy Merckx (11 grandes rondas con 5 Tours, 5 Giros y 1 Vuelta) estén lejos del alcance de cualquier mortal. Pero el resto, todos incluidos, los mejores de cualquier época, se encuentran en su órbita. Ayer se coronó, prácticamente sin oposición, como vencedor del Giro 2011, el segundo que se anota y que añade a los tres Tours conquistados y a la Vuelta que consiguió en el 2008.

Aseguró el sábado, en Sestrieres, a la finalización del capítulo montañoso de la carrera, que no quería arriesgar en la contrarreloj final de la prueba, en la que se impuso el especialista escocés David Millar. Sin apurar de frenada en las curvas, sin jugarse el tipo, porque no lo necesitaba, Contador finalizó la etapa en tercera posición y se permitió el lujo de saludar, levantar el puño, alzar los brazos y hasta disparar su típico tiro como Pistolero de Pinto , antes de cruzar la última meta. Solo le faltaba pisar con su bici la alfombra con los colores de la bandera italiana, antes de subir al podio para escuchar un himno español incomprensiblemente con letra franquista.

Ayer, no solo ganó la general, sino que se apuntó el triunfo en la clasificación por puntos y la segunda plaza como mejor escalador de la carrera. Dos victorias de etapa también han nutrido su cesto de éxito, en un Giro 2011 en el que también ganaron Angel Vicioso, Fran Ventoso, Igor Anton y Mikel Nieve y que se tiñó de luto con la muerte, como consecuencia de una caída, del corredor belga Wouter Weylandt.

NI UN DIA MALO El Giro 2011, lejos de las penalidades que pasó hace un año para apuntarse el Tour, ha dado la sensación de ser el triunfo más fácil logrado en las seis grandes rondas que ya configuran su palmarés. "He tenido la suerte de no sufrir ni un solo día malo y hasta he podido disfrutar con un final de ensueño aquí en Milán", repitió ayer Alberto Contador tras su coronación en Italia. La sensación que dio era que terminaba la prueba fresco como una rosa, como si quisiera hacer juego con la maglia que lucía.

EL FUTURO DEL TOUR Sin duda, ha sido el más fuerte y no parece que el desgaste sea un obstáculo para que afronte dentro de un mes el Tour 2011, al que puede concurrir sin ningún problema, a pesar de que todavía no haya una sentencia definitiva del agotador caso del clembuterol, ya que el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) no atenderá la vista oral hasta los primeros días del mes de agosto. "Antes de tratar el Tour quiero esperar unos días para ver cómo me recupero del Giro y luego hablaré con mi director", indicó ayer Contador. Precisamente ha sido su director Bjarne Riis, máximo responsable de su equipo, el Saxo Bank, quien ha pregonado con mayor desparpajo que "el gran objetivo de la temporada no es el Giro sino el Tour". Ayer, sin duda, al igual que durante las tres semanas pasadas en Italia, Contador ha demostrado que está preparado para cualquier reto, como el doblete Giro-Tour.