Era algo que llevábamos esperando dos años, luchando por ser campeones del regional y hasta ahora únicamente habíamos conseguido quedar subcampeones". La alegría del nuevo campeón extremeño de rallys, Jesús Castilla, era evidente tras hacerse el sábado con el título en la prueba disputada en Riolobos y alrededores.

Castilla, jerezano, ha tenido como copiloto a Angel Cano, calificó el rally de "muy entretenido, a pesar de las muchas roturas de motor y salidas de pista" ya que tuvo "tramos cronometrados rápidos y otros más lentos y técnicos".

Tras conocer el abandono de su principal rival, David Quijada, confirmaba que "ya teníamos el campeonato al alcance y nos marcamos el objetivo de terminar la carrera lo mejor posible". Le dedicaba el triunfo a su mujer y a sus dos hijas, "además de a mi hermano, al copiloto Angel Cano y al campeón de rallyes de asfalto, José Joaquín Jiménez Campos, que nos han venido a ayudar en toda la carrera".

La cita, incluida en el calendario de la Federación Española de Automovilismo, tuvo como gran estrella a Xevi Pons, vencedor absoluto. "La prueba ha estado muy bien y estamos muy contentos por haber acabado todas las pruebas del calendario con el valor añadido de haber conseguido vencer en todas", comentaba el catalán, para el que la carrera "ha sido muy bonita y ha contado con mucha afición presente en diferentes lugares".

Sobre la competición en sí comentaba que "tras conseguir una ventaja amplia en la sesión matinal, la tarde nos la hemos tomado con más calma para conservar la mecánica". A pesar de estar acostumbrado a los triunfos, comentaba que "ahora toca disfrutar de estos momentos, que aunque parecen fáciles desde fuera son muy difíciles, ahora lo celebraremos con una buena cena con el equipo a quiénes les decido la victoria por su esfuerzo durante toda la temporada para mantener el vehículo y al dueño de la escudería, José Cubero, porque sin él no estaríamos aquí compitiendo".