Jorge Campillo mejoró en la segunda jornada del Abierto de España, pero no fue suficiente para pasar el corte y se queda fuera de los dos últimos días de competición. El cacereño, con una vuelta de 75 golpes, rebajó su registro del jueves (78), aunque cerró con más once, cuando el corte estuvo ayer en más nueve.

Pablo Larrazábal asumió ayer, con una trabajada vuelta al par (71), el liderato en una segunda jornada en la que el viento dificultó aun más el ya de por sí complicado campo del gaditano Real Club Valderrama, que hizo estragos en buena parte de las tarjetas.

Si Valderrama ya es un campo extremadamente difícil, cuando el viento lo azota puede hacer de él un infierno para cualquier jugador. Y eso sucedió ayer en el primer torneo en suelo europeo de circuito del Viejo Continente de 2016.