Fin de ciclo en el rugby extremeño. El más genuino representante regional en la historia, el CAR Cáceres, vivió ayer una muy dura jornada con el descenso desde la Primera Nacional. Fue ante el CAU Metropolitano y pese a vencer en el encuentro de vuelta (25-20) en un partido que dominó hasta el final, pero en el que no supo conservar la renta adquirida a lo largo del choque.

El resultado deprime extraordinariamente al cuadro que entrena Martín Rojo y a sus incondicionales. Y es que se ha quedado a un solo punto de conseguir la permanencia, ya que los madrileños habían ganado por solo 9-3 en el encuentro de la ida.

Y a fe que el cuadro extremeño lo tuvo en la mano. Un ensayo en el minuto 50 le puso con 25-13. Pero en el 70 llegó el mazazo, con otro ensayo del CAU.

20-3 al descanso

El conjunto cacereño llegó a disfrutar de una ventaja clarísima. Solo mirar el marcador en el descanso, con un palmario 20-3 (llegaron a ir antes 13-0) a favor, indicaba que todo estaba saliendo bien para los intereses del CAR. Pero no pudo ser y finalmente los madrileños tiraron de oficio y de físico para, incomprensiblemente, hacerse con la eliminatoria. Un verdadero jarro de agua fría.

El CAR era el único equipo extremeño en categoría nacional en una época en la que el rugby está ganando adeptos y ya se están creando otros clubs con aspiraciones de hacer temporadas de mérito. Pero el CAR ya piensa en volver a ser, de nuevo, un club grande.