BATE - 0: Veremko; Khagush, Kazantsev, Sosnóvski, Yúrevich; Krivets, Volodkó (Sivakov, m.65), Likhtarovich (Skavysh, m.70), Stasevich (Nekhaychik, m.46); Blizniuk y Rodiónov.

REAL MADRID - 1: Iker Casillas; Miguel Torres, Sergio Ramos, Pepe, Heinze; Sneijder, Gago, Guti (Van der Vaart, m.79); Drenthe, Raúl (Javi García, m.85) y Saviola (Bueno, m.89).

GOL: 0-1, m.7: Raúl.

ARBITRO: Terje Hauge (NOR). Mostró cartulina amarilla a Sosnóvski (m.23), Blizniuk (m.75) y Khagush (m.89), por el Bate; y a Heinze (m.8) y Torres (m.43), por el Real Madrid.

El Real Madrid venció todas las adversidades, al frío intenso de Minsk y su plaga de lesionados, para alcanzar los octavos de final de Liga de Campeones de forma matemática, gracias a un bello gol de Raúl González.

Reapareció la mejor versión del Real Madrid en Europa. Recuperó su carácter de ganador cuando la necesidad apretaba, con el termómetro bajo cero entre la nieve de Bielorrusia, tras dos derrotas consecutivas ante el Juventus italiano que invadieron de dudas el último proyecto del técnico alemán Bernd Schuster.

Necesitaba el técnico alemán un buen partido. Lo demandaban aún más sus futbolistas, que ante el Bate recuperaron autoestima con un equipo sobreponiéndose a todos los problemas, sin seis titulares lesionados pero con casta desde el pitido inicial.

No había mejor forma para entrar en el partido que hacerlo marcando. Sólo había dado tiempo a Drenthe a darse cuenta de que su banda sería un chollo, emparejado con el flojo Khagush, cuando Raúl se reencontraba con el gol en Liga de Campeones. El capitán, máximo goleador europeo, hizo bueno el segundo pase de Drenthe y los fallos en cadena de la defensa rival, con un control con el muslo y un disparo potente, imparable para Veremko (min.7).

Las lesiones han llevado a Schuster a dar con la tecla defensiva. El regreso de Sergio Ramos al centro de la zaga, ha ayudado a dejar la puerta a cero en dos partidos consecutivos. El único impedimento es la renuncia al costado derecho en ataque, donde Miguel Torres apenas asoma, centrado en mantener su seriedad defensiva.

El duelo era intenso, el Bate mostraba sus carencias en su búsqueda de puntos que le permitiesen estar en la UEFA, limitado en la técnica y alejado de la imagen que puso ante las cuerdas al Juventus Turín, que sólo sacó un empate de su visita más plácida en lo climatológico.

La salud del Real Madrid depende del día de José María Gutiérrez ´Guti´ y Wesley Sneijder. Suman imaginación y movilidad. Toque y pegada, que unida a la solidez defensiva de Fernando Gago concede equilibrio al equipo. Impidieron que llegase con claridad el Bate en el primer acto. Un intento lejano que no vio puerta de Volovko fue la única noticia ofensiva local.

La autopista en la derecha la aprovechó Drenthe, que no supo sentenciar el partido. Un contragolpe de manual le dejó con todo a su favor, en superioridad dos contra uno, que no interpretó bien. Estrelló su disparo en el defensa rival en los últimos instantes del primer acto.

LA HEROICA Mantuvo la actitud el Madrid en la segunda parte, en la que aceptó un intercambio de golpes que no le beneficiaba. Necesitaba parar el partido y sólo fuertes choques en balones aéreos lo hicieron. Guti y Ramos acabaron con vendajes por pequeñas brechas, dando la nota de heroicidad a un triunfo clave.

Alejado de su mejor imagen, Gabriel Heinze permitió la ocasión más clara del Bate. Regaló un balón a Blizniuk, el jugador de más peligro, máximo goleador de la Liga bielorrusa, que perdonó. Su disparo se marchó rozando la escuadra.

La inocencia del Bate se fue esfumando a medida que el Real Madrid retrocedió metros para lanzar peligrosas contras. Un disparo de Blizniuk rozó el palo en su última ocasión clara, mientas que Schuster golpeaba el banquillo con nerviosismo ante las ocasiones perdonadas de Saviola, Sneijder y Drenthe.

El larguero impedía el segundo de Raúl y el Real Madrid acababa achicando balones aéreos, con Ramos y Pepe imponiendo su poderío para sellar un triunfo vital, con el que el equipo blanco accede a los octavos, con posibilidades aún de hacerlo como primero de grupo.