El español Calos Moyá se alzó con el triunfo en el Abierto de Croacia por quinta vez, y el vigésimo de su carrera, al derrotar ayer en la final al rumano Andrei Pavel, por 6-4 y 6-2, en un partido cómodo que el mallorquín controló en todo momento.

Moyá había ganado en Umag en las ediciones de 1996, 2001-2003. El triunfo de hoy le sirve para romper una racha que se prolongaba desde que el pasado año levantó la copa de campeón en Buenos Aires, el 19 de febrero, más de un año sin ganar para todo un campón de prestigiosos torneos como Roland Garros en sus gloriosos años en los que llegó a ser número uno del mundo.

La gran experiencia en finales del mallorquín Carlos Moyá y también en este torneo donde lleva ya 43 victorias en partidos le sirvió para imponerse a Pavel, de 33 años, 132 del mundo, y conseguir una victoria en tan solo 68 minutos, para alzarse con su quinto título en el Abierto de Croacia.

Moyá confirma así su gran regularidad esta temporada donde ha sido finalista en Sydney y Acapulco, además de lograr los cuartos de final de Roland Garros y donde ha desplegado un buen tenis de saque y derecha.

El momento clave del encuentro fue el décimo e interminable juego del primer set, donde Pavel se defendió al máximo para desbaratar cinco bolas de parcial, una de ellas con doble falta del español. Conseguido este objetivo, Moyá jugó mucho más suelto en el segundo parcial, rompió en el quinto juego y ya fue imparable hacia la victoria.

Pavel buscaba su primer título, el cuarto de su carrera, desde que ganó en el Masters Series de Montreal en 2001.

"He tenido oportunidades este año pero no he podido confirmarlas, pero ha sido increíble ganar aquí de nuevo este año", dijo el español.