El piloto español Carlos Sainz (Mini) no pudo con el sudafricano Giniel de Villiers (Toyota Hilux), que finalmente se impuso como ganador absoluto del Rally de Marruecos, una prueba en la que abandonó el catarí Nasser Al-Attiyah, que empezó la carrera como gran favorito.

Sainz necesitaba recortar los más de cuatro minutos que le aventajaba el sudafricano, pero éste último supo conservar la ventaja en todos los puntos de control, sin que Sainz pudiera hacerle sombra en ningún momento de la etapa.

En la etapa de ayer, tras De Villiers entraron el holandés Bernhard Tenbrinke, con 26 segundos de diferencia, y el saudí Yazeed Al Rahji, a 1 minuto y 17 segundos. Todos ellos corrían con Toyota Hilux. De Villiers, que este miércoles sacó más de trece minutos a Sainz, gana así por cuarta vez el rally marroquí, esta vez bajo los colores de Toyota, mientras que antes lo hizo con Nissan y con Volkswagen.