El Arroyo se frota las manos. El cadismo tiembla. El motivo, la siguiente parada del club arroyano es el Ramón de Carranza, un campo de grato recuerdo donde el año pasado consiguió dos victorias de prestigio, una en la Copa del Rey y la otra en liga, y donde esta temporada espera poner fin a su racha de cuatro derrotas seguidas lejos del Municipal, es decir, todos los partidos que ha disputado hasta ahora.

El Arroyo, un novato en la categoría entonces, visitó por primera vez el mítico estadio del Cádiz a mediados de septiembre del 2012. Era la segunda ronda de la Copa y el conjunto de Juan Marrero infligió el primer castigo a los amarillos. Se impuso por 1-2 con tantos de Toni e Iban Espadas. Ninguno de los dos jugará este domingo (19.00 horas). El primero ha cambiado de equipo (Cacereño), el segundo sigue recuperándose de una larga lesión en la que empieza ver la luz al final del túnel.

Ambos repitieron en la segunda visita al Carranza, a principios de noviembre del pasado año en la undécima jornada de liga. Pero aquel 4 de noviembre el castigo del Arroyo al Cádiz fue aún mayor, dejando una herida que el cadismo tiene ganas de vengar. Además de Toni e Iban Espadas, Carlitos, Edu Espada y Chirri vieron puerta en aquel 2-5 que 300 hinchas arroyanos pudieron ver en directo en la grada del estadio de la Tacita de Plata . Curiosamente, tampoco ellos podrán repetir en esta ocasión, ya que ninguno sigue en el Arroyo.

El Cádiz, precisamente, perdió ayer su partido liguero pendiente en Albacete (2-1) después de que el centrocampista Núñez anotara el tanto de la victoria local en los últimos minutos del encuentro.