Plasencia Galco: Tate (10), Almeida (0), Lledó (18), Vile Kaunisto (7), Nigel Wyatte (17) --cinco inicial-- Mario Plata (5), Marc Solá (7), Alberto Rodríguez (11), Javier Salsón (6), Roberto de la Rosa (2).

Prat: Pau Ribas (17), David Martínez (6), Val-logera (5), Jesús Benito (5), Daniel Bousa (10) --cinco inicial-- Sanmartí (7), Núñez (5), Marc Rubio (6), Araque (7), Albert Teruel (6).

Arbitros: González Cuervo y Valle Iglesias. Bousa (min. 22) y Pau Ribas (min. 39).

Marcador por cuartos: 18-19, 41-36 (descanso), 64-57 y 83-74 (final).

Incidencias: 1.000 espectadores en el Pabellón Ciudad de Plasencia. En el descanso del encuentros se procedió a la presentación de los equipos de las categorías inferiores del Plasencia Galco.

Logró el Plasencia Galco un nuevo triunfo en casa, donde gana todo, al contrario que fuera. Tras sufrir dos claras derrotas consecutivas en Logroño y La Laguna, el conjunto de Iván Déniz volvió a resarcirse en su cancha. Hubo más público que en anteriores ocasiones en el pabellón y eso ayudó a los extremeños, lo que ayudó de nuevo a su motivación.

La victoria supone que el Plasencia vuelve a hacer cálculos para estar en las eliminatorias por el ascenso a la LEB y pierde de vista la zona de play-out . El contraste entre los resultados de casa y fuera hacen que ni el equipo ni la afición sepan hacia qué polo de la clasificación mirar.

Ayer se vio a un equipo placentino en el que pesó más el ataque que la defensa. El acierto ofensivo resultó notable, liderado por Jorge Lledó, que volvió a ser el mejor del partido con 18 puntos. Arrastró a los suyos hacia el éxito en los momentos complicados.

LUCHA CONSTANTE El partido fue mucho más igualado que lo que pueda indicar el marcador. La diferencia final fue la máxima en todo el encuentro y el Plasencia no las tuvo todas consigo nunca, pese a llevar la iniciativa.

En el primer cuarto, los locales salieron muy enchufados. Con una defensa práctica, el Plasencia provocó que el Prat tardase casi cuatro minutos en anotar la primera canasta. Además, el Plasencia empezaba a dominar el juego interior ayudado por los problemas de faltas de Bousa.

Al final de los primeros diez minutos, los catalanes habían conseguido rehacerse y dominaban en el electrónico por la mínima diferencia (18-19). La igualdad continuó hasta el segundo cuarto, con el Prat apoyado en los triples de Araque para contrarrestar la creciente eficacia placentina en ataque. El 41-36 del descanso daba esperanzas a la grada.

Tras la reanudación, Bousa fue eliminado muy pronto (min. 22), lo que facilitó el trabajo de los pívots locales. La iniciativa ya no se perdería y daba la impresión de que el Plasencia no iba a permitir ningún tipo de reacción (64-57, min. 30).

Cada vez que el Prat se acercaba, el conjunto de Déniz volvía a dar un nuevo tirón. La diferencia llegó a ser de dos puntos (66-64, min. 33), pero entonces el ímpetu del equipo placentino evitó que la victoria se escapase. El camino final fue tranquilo y además se recuperó el basket-average desfavorable, lo que puede ser importante de cara al futuro.