5.718 niños, 184 localidades representadas en 343 entidades que alinearon a 465 equipos, 725 entrenadores y delegados, 254 personas de la organización... La clausura de los Judex ayer en Badajoz batió todos los récords de concentración deportiva en Extremadura, pero no hubo problemas más allá de los clásicos golpes y raspaduras que se produjeron en los numerosos encuentros de baloncesto, fútbol sala, balonmano y voleibol, entre otros deportes, que se disputaron. Un clima espléndido lució en el parque Lusiberia y las canchas instaladas en su recinto.

El balance de la experiencia, que era la primera vez que se acometía, resultaba positivo para el coordinador de los Judex, Gabriel Solano. "Los niños han disfrutado, que es de lo que se trata", afirmaba por la tarde, antes del desfile que cerraba los Juegos Deportivos Extremeños.