Todo el mundo pensaba a inicios de temporada que el Rayo Majadahonda sería la cenicienta del grupo. El equipo con menos presupuesto de Segunda División y, por nombre, el más modesto de la LFP. Pero nada más lejos de la realidad. El Rayo Majadadahonda apenas ha pasado dos jornadas en descenso (las dos primeras) y se ha convertido, en varios tramos de la temporada, en equipo revelación. Eso sí, nadie duda de que será un rival directo por eludir el descenso del Extremadura, por lo que el choque cobra una dimensión especial hoy.

Los de Antonio Iriondo acuden al partido sin la presencia de Fede Varela, su hombre más determinante en el centro del campo. Tampoco estará Aitor García, su marcha más dolorosa en el mercado invernal camino de Gijón. Pero sin embargo, con estas dos mismas ausencias, supieron cortar el pasado fin de semana su mala racha de nueve encuentros sin ganar y derrotar 1-0 al Nástic, victoria que le permite llegar al Francisco de la Hera con un colchón de cuatro puntos sobre el Extremadura.

Pese a la diferencia, Iriondo señala que «no es determinante para ninguno, pero sí muy importante. Espero un partido muy intenso precisamente por este motivo». El preparador majariego avisa de que su equipo no vendrá a Almendralejo a especular: «iremos a ganar, como siempre, ya que nunca contemplamos otra idea. Y si no sale, pues tampoco nos rasgaremos las vestituras», comenta con la tranquilidad de verse desahogado en la tabla.

En la plantilla del Rayo estará Dani Romera, objeto de deseo por el Extremadura en el mercado invernal y fichaje de campanillas para los madrileños. A su llegada al club ha comentado que «llevo mucho tiempo sin jugar de titular, después de sufrir una lesión en el hombro en septiembre y tengo muchas ganas de volver a disfrutar del fútbol otra vez. Para eso vengo aquí, para ayudar al equipo lo máximo. Tengo ganas de jugar el sábado», explicó en declaraciones difundidas por el Rayo Majadahonda.

En el retrovisor de ambos equipos no hay enfrentamientos históricos entre clubes. El único precedente se remonta al partido de la primera vuelta y el sonado 1-4 que el Extremadura le endosó al cuadro majariego en el Wanda Metropolitano, con triplete de Enric Gallego. Las cosas han cambiado, aunque el partido sigue siendo una final para todos.