La selección española masculina, pese a las bajas de algunos de sus mejores atletas, logró más victorias que nunca (seis) en la Superliga de Florencia y alcanzó su objetivo de mantenerse entre los ocho mejores equipos del continente. La victoria de Jesús España en la carrera de 3.000 metros, obtenida poco después de que Antonio Reina dominara con autoridad los 800, certificó la permanencia.

Alemania, con 113 puntos, es campeona por delante de Francia (104) y de Italia (98), mientras que Gran Bretaña acompañará a República Checa en el descenso.