"Es verdad que están conmigo. Pues sí. Ahora mismo me ha mandado un mensaje Bezares. Todos han estado conmigo, todos: el entrenador, los jugadores, todo el club. Estoy muy animado y les estoy muy agradecidos". Tiempo de espera y de paciencia para el futbolista del Arroyo Domingo 'Chori' Pérez, que se opera hoy en Badajoz de la rotura de ligamento cruzado de la rodilla. Ayer estaba con la procesión por dentro, confiado la recuperación y tranquilo. Y, ante todo, optimista.

Con 19 años, y pese al problema puntual que se le ha planteado, es optimista para lo que suceda después de la intervención, que le practicará a primera hora de la mañana el doctor José María Cortés. "Que me esperen para la recuperación", dijo el extremo, natural de Cáceres y uno de los talentos jóvenes con más futuro de la comunidad extremeña.

"He tenido mala suerte y fastidia mucho", reconoce. Cuando firmó por el Zaragoza juvenil, fue el pubis el que no le dejó hacer la temporada. En ésta, una caída de un compañero encima en un entrenamiento le ha producido el nuevo contratiempo.

"El es muy fuerte. Si ha podido con lo anterior, ahora también", dice Olga, su madre. Los ánimos de todos han sido decisivos. La plantilla ya se hizo una foto en el vestuario deseándole todo lo mejor. En los últimos dos triunfos su memoria ha estado muy presente.

En pretemporada

En principio, el futbolista tendrá que estar con un vendaje unos diez días, volverá a Badajoz para que se lo quiten y en tres meses podrá ya al menos trotar. En seis meses, "en la pretemporada", según el deseo de su propia madre, volverá a los terrenos de juego.

"Es muy buen futbolista y muy buena persona. Le tenemos mucho cariño. Pero que no se acaba el fútbol ahí. Yo espero que sea un paso atrás, pero para coger impulso. Espero que todo vaya bien". Su entrenador, Juan Marrero, le enviaba este mensaje de ánimo tan cariñoso al futbolista, al tiempo que se lamentaba de la cantidad de infortunios en forma de lesiones que está padeciendo en su plantilla.