El Forma Cáceres 2016 terminó de firmar en el puente de Todos los Santos un nefasto arranque liguero en el grupo Sur de División de Plata. Dos nuevas derrotas --y van cuatro consecutivas-- dejan al equipo de Gustavo Montero muy lejos de sus aspiraciones iniciales y a la espera de encontrar un punto de inflexión para variar el rumbo de una nave a la que los vientos no parecen soplarle a favor.
Sin modelo de club ni estructura deportiva
No forma parte del presente de la mala situación, aunque la ausencia de un modelo de club y de estructura deportiva a lo largo de los últimos años repercute negativamente ahora. Detrás de un primer equipo conformado a golpe de talonario no hay nada debajo de donde poder tirar. La falta de profesionalización en los despachos, de opiniones contrastadas respecto a la política deportiva o al conocimiento de la categoría y la falta de fiabilidad a la hora de manejar información respecto a jugadores o técnicos acaba pasando factura. Tampoco hay una idea clara respecto a la línea a seguir más allá de la primera plantilla.
Desconocimiento en algunos fichajes
No ha habido una comisión técnica a la hora de abordar los fichajes. No se sabe si las contrataciones vienen avaladas solo por el técnico, lo cual diría muy poco de la directiva, o si ha sido la propia directiva la que se ha encargado de esta misión, lo que tampoco mejora la situación. El caso es que los nuevos aún no han demostrado su caché .
Muchas lesiones y problemas físicos
Pese a que la planificación del trabajo físico es cada vez más científica, las lesiones y los problemas han asolado a los cacereños. Salvo Bole y Antonelli, el resto de la plantilla ha tenido lesiones o problemas físicos: Luisma Haro, lesión de abductores y gastroenteritis; Carlos Sierra, problemas de espalda y lesión de abductores; Mario, problemas de espalda y un esguince de tobillo; Cassio, problemas musculares y lesión de rodilla; Purao, gripe; Thiago Paz, lesión en la rodilla; Luis Coria, problemas musculares; Masa, problemas de abductores; Kike Barroso, lesión en los ligamentos de la rodilla; Raúl Rodríguez, gripe y lesión de abductores. Así, es complicada la continuidad de los jugadores y del rendimiento del equipo.
Sin contraataque y con poca tensión
Al Forma le han perdido sus inicios en los últimos partidos. El equipo no se ha puesto a funcionar hasta que no ha encajado algún gol, lo que evidencia falta de tensión. Además, desaprovecha la opción del contragolpe, mientras que sus rivales lo convierten en el arma incendiaria contra el Forma.
El esquema de juego y el portero-jugador
Al equipo cacereño aún no se le ve un claro patrón de juego. Juega demasiado estático y no aprovecha el potencial de cada uno de sus jugadores. Por otro lado, se maneja bastante bien en la situación de superioridad con portero-jugador cuando va por detrás en el marcador, pero es tanta la desventaja con la que llega a los finales de partido, que aún no ha podido sacar partido en forma de puntos.
