El Barcelona espera proclamarse campeón de Liga hoy mismo en su enfrentamiento en el Ciudad de Valencia frente al Levante. El equipo valenciano, por su parte, lucha en el polo opuesto de la categoría, intentando que el Mallorca, tercero por la cola, no se le acerque más (22.00 horas, La 2).
Los catalanes dispondrán de la primera oportunidad para alzarse con el título de Liga, objetivo que podrá alcanzar de tres formas: si el Real Madrid pierde su partido contra el Sevilla, si el Bar§a gana el suyo contra el Levante o si madridistas y barcelonistas consiguen el mismo resultado. 11.000 aficionados llegados de Barcelona estarán en las gradas para cantar el alirón.
La expectación es máxima en el club, porque desde hace unos días sólo se habla de celebraciones y de cómo llevarlas a cabo en una ciudad que hace seis años que no vive el éxtasis de la celebración de un título de Liga. Muchos sinsabores han llegado desde que lo hiciese en el estadio de Mendizorroza.
El equipo viajó por la tarde a Valencia en avión. Ha concretado regresar a la Ciudad Condal cuando concluya el partido contra el Levante y no esperar al domingo, sea cual sea el resultado que se dé y su trascendencia. En el Ciudad de Valencia estará toda la plantilla, ya que hoy se incorporarán el sancionado Belletti y los lesionados Larsson, Gabri y Maxi López.
PRUDENCIA Los jugadores azulgranas, no obstante, se han decantado por una muestra de euforia más moderada que la que ha rodeado al entorno del club, y los reclamos de prudencia se han producido constantemente, sobre todo por parte del capitán, Carles Puyol.
En la misma línea estuvo el técnico, Frank Rijkaard. "No tengo que pensar, sino trabajar. Hay que estar muy contento porque puedo vivir este momento, pero me deja indiferente, aunque sea muy frío", indicó ayer.
El holandés podrá contar con el equipo que más ha utilizado esta campaña, exceptuando la ausencia Belletti, que será suplido por Oleguer Presas en el lateral derecho.
Respecto a las celebraciones, comprendió que "el club tiene que planificar" y respecto al Real Madrid, reconoció que "puede parecer pretencioso, pero es que me da igual. Esto ha funcionado hasta ahora".
"Cuando el jugador tiene la mentalidad correcta, no pasa nada por su cabeza, porque entenderá que el trabajo no está hecho. Ya han demostrado que son un gran grupo y que son inteligentes. Sólo deben seguir de esta manera", remarcó.
La directiva del Barcelona, presidida por Joan Laporta, viajará con el equipo a Valencia para estar junto a los futbolistas, acompañada por el secretario general del deporte de la Generalitat, Rafael Niubó.
