Un especialista para asentar el putt. El trabajo de Sergio García durante todo el año ha empezado a dar resultados desde el verano, a partir de junio, cuando acabó cuarto en el Buick Classic, en el circuito estadounidense, y décimo en el Open Británico. A ese trabajo con el swing, ha añadido, además, unas correcciones también con el putt, después de entrenarse durante unos días con Jim McLean, un especialista en el juego corto, que ha reforzado la labor que hacía con su padre y le han permitido ganar en confianza.

El resultado es que Sergio ha vuelto a reencontrarse con el triunfo a principios de este mes y que se tomará un respiro estas navidades con la convicción de que la 2004 será su temporada.

"Me he dado cuenta de que, con estos cambios, cuando le doy bien a la bola, no hay nadie que le pegue mejor que yo. El cambio de swing me ha mejorado los hierros bastante, y con el drive no hay nadie que le pegue mejor que yo", ha afirmado en la edición de diciembre de la revista Golf Digest.