Disgustado por el resultado («no hemos sido capaces de romper nuestra mala racha»), pero «contento» porque su equipo había mostrado cierta mejoría respecto a los partidos anteriores. Así se confesaba Julio Cobos, entrenador del Cacereño, al final del encuentro ante el Trujillo. «Hemos sido capaces de generar muchas ocasiones de gol, cosa que en los partidos anteriores nos estaba faltando. Lo que ahora nos falta es la guinda del fútbol, que es meter gol. Hemos tenido ocasiones más que suficientes para tener un resultado más amplio. Al final se te queda cara de tonto», reconocía el técnico. En cuanto a los cambios en el once inicial, lo justificó asegurando que todos los futbolistas están para jugar. También dijo que los malos resultados están haciendo daño al ánimo del equipo. «Los resultados refuerzan el trabajo que se hace durante la semana y aquí solo vale ganar».

Maxi Ovejero, entrenador del Trujillo, más satisfecho con el empate, aseguró que habían conseguido «que jugaran por donde queríamos que nos jugaran. Donde teníamos que hacernos fuerte era por dentro». J. J. TORBELLINO