"La temporada se está haciendo larga por los resultados, pero el equipo está jugando bien", declaró ayer el entrenador del Cacereño, Julio Cobos.

Cobos incide en que los "pequeños detalles" han impedido al equipo que dirige estar con opciones para haber disputado las cuatro primeras plazas. "Está siendo difícil el final. Los partidos de Cádiz y Albacete nos hicieron muño daño. Después empatamos otro en casa en el que fallamos un penalti. Nos ha faltado una pizca de suerte, que nos ha dado la espalda, pero los chavales se están dejando la piel", enfantizó.

El objetivo para el duelo ante la Balompédica Linense será el de conseguir un triunfo para olvidar del todo la posibilidad del puesto de promoción de descenso, que aún no se ha evitado.

Cobos, que ni siquiera desveló si Vargas o Miguel serán el sustituto del sancionado Fuentes en la portería, contestó al entrenador de su próximo rival, Rafael Escobar, en las que éste decía que el campo les perjudica más, diciendo que le viene mal "a los dos por igual. El suyo no es un fútbol demasiado elaborado, es muy directo", aseguró Cobos.

Sobre el duelo en sí, auguró un buen espectáculo. "Ellos son muy buenos a balón parado", subrayó el técnico, que tendrá seis bajas confirmadas.