Un año después de jugar la final del Abierto de Australia, Rafael Nadal y Novak Djokovic volverán a enfrentarse. Será en la nueva central Ken Rosewall Arena de Sydney, en el segundo individual de la final de la ATP Cup que hoy enfrentará a España y Serbia (08.30, La 1).

España, que estuvo al borde del KO en cuartos de final ante Bélgica y donde Nadal perdió su partido con David Goffin, ayer superó a Australia con contundencia por 3-0, mientras que Serbia se impuso a Rusia por 2-0.

Nadal dio el punto decisivo para la clasificación en un duro partido con Alex De Miñaur que le forzó al límite antes de ceder por 6-4, 5-7 y 6-1. El joven tenista australiano, de origen español, de 20 años y 18 mundial, le arrebató el saque de salida y, con un tenis agresivo y valiente, mantuvo esa ventaja para apuntarse la primera manga y aguantar la igualdad en el segundo (5-5) hasta que cedió el primer break point del partido y el set. Salvada la situación, Nadal le arrebató tres servicios en la definitiva manga para certificar su triunfo.

Antes de Nadal, un brillante Roberto Bautista dio el primer punto a España al imponerse al polémico Nick Kyrgios (6-1, 6-1 y 6-4). El castellonense, número 10 mundial, jugó un partido «·perfecto», como valoró él mismo al final. En ningún momento dio opciones a Kyrgios. «Había que mantener la presión en cada punto», explicó. Bautista abre hoy la final ante Dusan Lajovic.

Serbia se ganó el pase a la final tras superar un duro duelo con Rusia. Lajovic se apuntó el primer punto al vencer a Karen Khachanov por 7-5 y 7-6 (7-1) y Djokovic logró el segundo al imponerse a Daniil Medvedev por 4-6, 7-5 y 6-1. Como Nadal, tuvo que dar la vuelta al marcador. «Ha sido un partido excepcional y emocionante, Daniil ha demostrado ser ya uno de los mejores jugadores del mundo», valoró.