El ciclista español Alberto Contador atribuye el positivo por clenbuterol en el último Tour de Francia a un caso de "contaminación alimentaria" del que ha sido víctima.

"Este es un auténtico error", dice Contador en una rueda de prensa en un hotel de Pinto, su localidad de residencia en las afueras de Madrid. "Creo que esto se va a solucionar de una manera clara, con la verdad por delante", afirma el tres veces campeón de la ronda francesa, que ha sido suspendido provisionalmente a la espera de que se aclare el caso.

Contador, también ganador del Giro de Italia y de la Vuelta a España, subraya que el caso se debe a una carne que tomó en el almuerzo del día en que fue sometido al control antidopaje, el 21 de agosto, jornada de descanso en el Tour.

El ciclista madrileño añade que la cantidad de clenbuterol hallada en su orina (50 picogramos) es "tan sumamente pequeña" que "no sirve para nada". "La Unión Ciclista Internacional entiende que es un caso especial, que hay que examinar, y quiere creer que dicha organización y la Agencia Mundial Antidopaje vea claramente cuál es el caso", resalta el ciclista.