Ambiente de sumo suspense alrededor del Cáceres. En la semana decisiva para saber si juega o no finalmente en LEB Oro, el club valora y gestiona las distintas posibilidades que hay sobre la mesa.

El escenario aparece bajo el signo de la interrogación más absoluto. Las previsiones eran de lo más agoreras, y los directivos han dado por hecho que el equipo jugaría finalmente en EBA.

Contactos a distinto nivel hacen que la solución que se adopte sea, al día de hoy, imprevisible. El Cáceres valora que tiene asegurados 340.000 euros en subvenciones (180.000 euros de la Junta; 100.000 del ayuntamiento y 60.000 de la Diputación). Entre aportación de empresas y abonados se podrían reunir 500.000 euros de presupuesto. ¿Es suficiente? Esa es la cuestión ahora en entredicho. Ha habido y habrá reuniones entre ayer y hoy preámbulo de una solución definitiva. Lo que no admite dudas es que el próximo viernes termina la moratoria de la FEB y que la decisión se tiene que tomar antes, pese a que ese día haya prevista una reunión con el director general de Deportes, Antonio Pedrera.