El baloncestista placentino Iván Corrales negó ayer haber violado a una chica de 21 años y aseguró que las relaciones sexuales fueron consentidas, mientras que la joven ratificó que "se opuso claramente".

La Sección Cuarta de la Audiencia de Sevilla inició ayer, a puerta cerrada, el juicio contra el jugador, que se enfrenta a una petición del fiscal de nueve años de cárcel por agresión sexual, que la acusación particular eleva a un total de 15 años de cárcel ya que incluye 11 por agresión sexual y otros 4 por detención ilegal.

El deportista y la joven se ratificaron ante los jueces en sus declaraciones de la instrucción, cuando el primero reconoció haber mantenido relaciones sexuales con la joven pero siempre "consentidas" y "naturales". La denunciante dijo que bebió y que ello mermaba sus facultades, pero aseguró que "se opuso claramente". El suceso ocurrió el 12 de noviembre del 99.