Real Madrid - 3: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos, Raúl Albiol, Marcelo; Gago (Juanfran, m.85), Xabi Alonso, Granero (Guti, m.58); Kaká (Benzema, 67); Cristiano Ronaldo e Higuaín.

Osasuna - 2: Ricardo; Azpilicueta, Roversio (Flaño, m.68), Sergio, Monreal; Rúper, Nekounam; Juanfran (Masoud, m.61), Vadocz, Camuñas; y Aranda (Calleja, m.75).

Goles: 0-1, m.7: Aranda. 1-1, m.25: Cristiano Ronaldo. 1-2, m.42: Vadocz. 2-2, m.44: Marcelo. 3-2, m.89: Cristiano Ronaldo.

Arbitro: Mateu Lahoz (colegio valenciano). Amonestó a Marcelo (71) por el Real Madrid y a Monreal (72) por Osasuna.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 35 jornada de Primera División disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante la presencia de unos 75.000 espectadores.

Un gol a un minuto del final del portugués Cristiano Ronaldo resucitó al Madrid (3-2), que estuvo a punto de tirar toda la temporada ante un Osasuna voluntarioso y bien ordenado, que sacó a relucir las carencias defensivas de un equipo instalado en el alambre en la lucha por el título.

Un encuentro que se perfilaba sencillo ante Osasuna, con las especulaciones sobre las rotaciones de Camacho, se envenenó por errores defensivos y un juego ofensivo anárquico, sostenido por la calidad individual de Cristiano.

La ansiedad condujo al Madrid a falta de solidez defensiva. Quería sentenciar el encuentro antes de saltar al campo, pero tras comenzar a probar la inspiración de Ricardo, se encontró con un grave error que puso todo en contra. Raúl Albiol, firme toda la temporada, cometió su primer fallo de bulto a los siete minutos.

PRIMER SUSTO Dudó entre despejar con la cabeza o el pie un balón sencillo. Acabó dejándolo muerto a los pies de Aranda. Su mano a mano con Iker Casillas lo resolvió con paciencia y calidad para marcar a puerta vacía. Un exmadridista complicaba la lucha por el título al equipo blanco.

Cuando se espesaba el Madrid. Cuando Camuñas, futbolista de gran calidad técnica, sentaba a dos rivales pero disparaba alto, apareció Cristiano. Un testarazo con potencia rozando el palo, precedió a una acción individual que acabó en la red. Era el minuto 25 y en el momento en el que el fútbol se reduce a un solo jugador, curiosamente encontró el premio. Recibió en una banda. Arrancó contra el mundo, rodeado de cuatro rivales y, sin salida, soltó un disparo imparable.

Aguantó Osasuna minutos de arreón. Aranda suplió a la perfección a Walter Pandiani. Generó indecisión entre Sergio Ramos y Albiol. Aguantó el esférico como referencia y remató cuando vieron sus movimientos. Iker salvó su testarazo en el minuto 37, pero nada pudo hacer cuando, en vez de rematar, asistió picado a Vadocz, que, tras coger la espalda a Xabi Alonso, soltó un derechazo a la escuadra.

Restaban tres minutos para el descanso y el Madrid se despedía de la Liga. Necesitaba un gol con urgencia. Y lo consiguió. Un tanto que resume el desorden ofensivo. El lateral zurdo, Marcelo. El más bajito. Apareció por la zona del 9 para rematar en plancha con la cabeza a la red.

Nació la segunda parte con un ambiente frío. El planteamiento de Osasuna se desvanecía en unos minutos de ocasiones blancas que sacó Ricardo. Brillante ante Higuaín y en un remate potente de Cristiano que rechazó para lucirse, rápido, ante Kaká.

Las opciones de título se escapaban y el Madrid necesitaba un revulsivo. Pellegrini acudió a Guti, suplente por problemas musculares. Las dos primeras veces que entró en contacto con el balón pasó mal. No era su día. Había ansiedad por la victoria. Tenía que correr riesgos el equipo y no era el mejor día por los nervios defensivos.

Los milagros existen en el Bernabéu y su afición lo sabe. Lo intentó con centros desde la derecha, pero el milagro se hizo realidad desde el otro costado, donde Higuaín sacó un pase envenenado que remató de cabeza a gol Cristiano. La Liga sigue viva tras 89 minutos de sufrimiento.