Real Madrid: Iker Casillas; Sergio Ramos, Albiol (Kaká, m.70), Carvalho, Marcelo; Lass (Khedira, m.46), Xabi Alonso; Di María, zil, Cristiano Ronaldo; y Benzema (Gago, m.80).

Villarreal: Diego López; Angel (Mario, m.62), Catalá, Gonzalo Rodríguez, Joan Capdevila; Bruno, Borja Valero, Cazorla, Cani (Oriol, m.73); Rossi y Marco Ruben (Musacchio, m.65).

Goles: 0-1, m.7: Cani. 1-1, m.9: Cristiano Ronaldo. 1-2, m.18: Marco Ruben. 2-2, m.45: Cristiano Ronaldo. 3-2, m.79: Cristiano Ronaldo. 4-2, m.82: Kaká.

Arbitro: Fernández Borbalán (colegio andaluz). Amonestó a Benzema, Xabi Alonso, Di María; Angel, Cazorla y Bruno. Expulsó a Juan Carlos Garrido, técnico del Villarreal, en el 79.

Incidencias: Partido disputado en el Santiago Bernabéu ante 77.000 espectadores.

Cristiano Ronaldo, con tres goles y una asistencia a Kaká, rescató al Real Madrid en un duelo de fútbol que engrandece la Liga (4-2), tras una exhibición del Villarreal en el primer acto y una reacción, basada en los movimientos tácticos de José Mourinho, del conjunto madridista en el segundo para seguir en pie en la lucha por el título.

No defraudó a nadie un duelo esperado entre Madrid y Villarreal. En una Liga bipolar en la que los equipos salen temerosos ante los grandes, el submarino amarillo es un ejemplo para todos. Dio un recital que obligó a tirar de orgullo a los blancos. Ese espíritu de lucha que tantas batallas ha salvado.

Lanzó desde el inicio un mensaje el Villarreal, de puro fútbol, que el Madrid no dudó en aceptar. Con tanta valentía que terminó viéndose superado, mostrando una debilidad defensiva que solo se había visto en el Camp Nou. Alejado del poderío que mostró en el inicio de temporada, el enfado de Mourinho crecía por el mal concepto defensivo del grupo, más que por la falta de una idea ofensiva, reducida a la calidad individual.

EL PRIMER GOLPE Lanzó un fútbol de altos quilates Borja Valero para el Villarreal. En el Barcelona, los canteranos se exhiben en el primer equipo. En el Madrid, muchos válidos se hacen estrellas en otros clubs. Asociado con un Cazorla superior, generaron la duda entre los mediocentros del Madrid y la defensa de cuatro. Creaban espacios, ponían pausa en los metros de la verdad y encontraban la calidad de Rossi y la pegada de Marco Ruben.

Un disparo ajustado al palo de Cazorla al primer minuto fue la carta de presentación. Seis después, Cani definía de maravilla, con un toque preciso con su pie derecho al esférico, para superar con un gesto de calidad la desesperada salida de Casillas. Era la primera vez que el Madrid iba por detrás en el marcador en el Bernabéu. Y sus síntomas no eran buenos.

Pero siempre le quedará Cristiano. A los nueve minutos, el mayor devorador del gol acudió a su habitual cita. Benzema inventó un pase entre líneas a zil que regaló el tanto al portugués. El ritmo era frenético. Ninguno de los dos lo quería reducir pero el Villarreal estaba más cómodo.

El Madrid repitió errores mostrados en Getafe. Dejó de funcionar como bloque. Desconcertado defensivamente. Y el Villarreal se creció. A los 18 minutos, Marco Ruben se benefició de un despiste de Albiol, que rompió el fuera de juego, y ante Casillas no le pesó el ambiente del Bernabéu. Picó el balón perfecto a la red.

Debía tirar de carácter y apelar a lo heroico el Madrid. Y lo hizo tirado, como no, por su mejor hombre, Cristiano, que con dos goles más dio la vuelta al marcador. Después, incluso Kaká se permitió el lujo de volver a marcar en el Bernabéu. Madrid y Barça siguen con las espadas en alto.