En su día, Johan Cruyff avaló que el Barça pagara mil millones de pesetas por el fichaje de Ronald Koeman. Una cifra astronómica en el año 1989. También exigió fichajes caros como los de Stoichkov, Laudrup y hasta el de Romario. Acabó rompiendo con José Luis Núñez, entre otras razones, porque le negó el dinero que pedía para fichar a Zidane, Giggs, Rui Costa y Djorkaeff en 1996.

Pero a la necesidad que tenía Cruyff de disponer de los mejores futbolistas para edificar el dream team, unió también una indiscutible apuesta por la cantera. Milla, Amor, Guardiola, Ferrer, Sergi, Oscar, Roger, De la Peña iniciaron una larga lista de jugadores formados en La Masia que acabaron en el primer equipo. Iniciaron, también, una tradición, un modelo de cantera que ha reportado con los años al Barça jugadores como Messi, Iniesta y Xavi, incrustados en la élite mundial.

DOS FILOSOFIAS DISTINTAS Muchos aseguran que están los tres a la altura de Cristiano Ronaldo. Pero han salido gratis al Barça. "Nadie vale tanto dinero como el que ha pagado el Madrid por Ronaldo", aseguró ayer Cruyff. Los dos clubs, antagónicos en muchos aspectos, lo son también en sus proyectos deportivos. Y el extécnico azulgrana se alineó en favor del barcelonista. "Son dos filosofías distintas. Una apuesta por el fútbol base, y la otra, por comprar. Yo soy partidario de la primera, porque tiene muchas ventajas", reflexionó Cruyff en la Cadena SER.

El exentrenador azulgrana entiende que el Madrid ha creado un efecto inflacionista en el mercado que afectará en los precios de las siguientes transacciones que se pacten. "Si un club invierte mucho, luego es como un dominó: los demás también lo hacen", explicó. Uno de los primeros será el Manchester porque "al perder a un jugador importante" se sentirá obligado "a invertir lo que le han pagado". Ayer mismo, se daba por hecho de que el Manchester United estaba dispuesto a aportar 52 millones de euros por el fichaje de David Villa, el hombre sobre el que giran ahora los movimientos en el mercado: Madrid, Barcelona, Chelsea y el propio Manchester están dispuestos a casi todo por el todavía delantero del Valencia.

LA ´URGENCIA´ BLANCA Por ahora, nadie ha seguido la corriente de Florentino. Nadie, en el fondo, se ha sentido presionado como el nuevo presidente del Madrid para combatir el atractivo mundial generado por el Barça del triplete. Cruyff entiende que el éxito del equipo de Pep Guardiola ha desencadenado la generosa inversión blanca. Pero también "la urgencia" que tendrá el Madrid en la Champions porque la final del 2010 se jugará en el Bernabéu y no puede fallar.

En ello está Florentino Pérez, el personaje de estos días, que pretende anunciar un nuevo fichaje en las próximas horas. ¿Alonso? ¿Villa? ¿Ibrahimovic? ¿Forlán? Cualquiera de ellos puede ser el elegido.