A las 8.30 de la mañana comienza oficialmente el capítulo cuarto de la ´Era Ortuondo´. A esa hora están citados los componentes de la plantilla del nuevo Extremadura en el estadio Francisco de la Hera y de allí saldrán para su primer protocolo del ejercicio: el reconocimiento médico en la Clínica San José. Cumplida con la cita médica y analítica, por la tarde y el el Polideportivo Municipal Tomás de la Hera tendrán lugar otras pruebas, las físicas, para calibrar el momento de forma de cada uno de los jugadores azulgranas.

Mañana martes tendrá lugar el desplazamiento a Orellana la Vieja donde se llevará a cabo la concentración de pretemporada. El campo municipal de esa localidad, sus alrededores y las instalaciones de la Hospedería del Embalse, que por cierto dirige el almendralejense Francisco José Mulero, serán el marco en el que se desarrollen los primeros trabajos de esta nueva andadura con el vasco Iosu Ortuondo al timón de la nave azulgrana.

La mayoría de los componentes de lo que será el nuevo plantel almendralejense están desde ayer en la ciudad. Uno de los últimos en aterrizar en Almendralejo fue Martín Prest, el italoargentino llegó en autobús desde Sevilla al filo de las 20.00 horas.

UN CENTRAL, A PUNTO Pero la plantilla aún no está completa del todo y se sigue sondeando el mercado en busca de los dos o tres fichajes que quedan para completar las previsiones que se hicieron inicialmente. A estas alturas, y pendientes de lo que pase con el periodo de prueba al que se va a someter Martín Prest, las intenciones son las de hacerse con un delantero centro y un central. En los dos casos las negociaciones están muy avanzadas y en el del defensa todo apunta a que se trata de un cordobés, con pasado verdiblanco que podría llegar ahora de un equipo rojiblanco. En el club, como es norma, declinaron ayer confirmar o desmentir el tema, aunque la contración podría cerrarse esta misma mañana.

En cuanto al delantero, la pista cadista y gaditana que se ha venido siguiendo en las últimas fechas podría verse secundada por una conexión sudamericana que obligaría a tener que elegir en el último momento.