Ni protestó Messi su primera expulsión con el Barça como profesional, frustrado como estaba por el desenlace de la final de la Supercopa de España, el título que tenía más cerca. El título que perdió. Aguardó paciente a que Gil Manzano, el colegiado del partido, visionara sus golpes a Villalibre en la pantalla del VAR y al ver la tarjeta roja, la primera que recibía en 753 partidos, se marchó desilusionado a los vestuarios.

Se fue Messi tocándose, eso sí, la parte posterior de su pierna izquierda. Comprobando con su mano si esas molestias musculares que le habían impedido estar en la semifinal ante la Real Sociedad se habían agravado. Se fue en silencio, prolongando así su complejo año en el Camp Nou, que empezó el pasado verano cuando mandó un burofax para dejar el club.

A la espera de conocer la sanción que le imponga el Comité de Competición, oscilará entre dos y 12 partidos, si apuesta por el castigo mayor, Messi va digiriendo la cuarta expulsión en su larguísima carrera profesional.

1.- 2005, Barça B

27 de febrero. Peña Sport de Tafalla - Barça B (0-0). Jornada 25 de Segunda B.

Acababa el partido en Navarra cuando Messi, que tenía entonces 17 años, entró en el área. Y fue derribado. Pidió el joven con vehemencia el penalti a Sánchez Maroto, árbitro del colegio vasco. Pero este no le hizo caso y acabó enseñándole la tarjeta roja (m. 82) a Messi, que ya era la gran estrella del filial azulgrana dirigido por Pere Gratacós.

2.- 2005, Argentina

17 de agosto. Hungría - Argentina (1-2). Amistoso.

"Nada, toqué dos pelotas", recuerda Messi sobre su debut con la camiseta albiceleste. Era un amistoso en Budapest. Y José Pekerman, entonces seleccionador, le abrió la puerta del equipo. Apenas estuvo 43 segundos en el campo. Recibe el balón en el centro del campo, inicia una conducción hacia el ataque y Vilmos Vanczak le agarra de la camiseta. Messi se revuelve hacia él soltando su brazo derecho. Merk, el árbitro alemán, le saca amarilla al defensa húngaro y la roja directa a Leo.

"Ahí ni le tocó", argumentó luego el jugador argentino a TycSports. "Tenía 18 años, entré y me echaron. Entonces, pensé: 'Igual no vuelvo nunca más'".

3.- 2019, Argentina

6 de julio. Argentina - Chile (2-1). Partido por el tercer y cuarto puesto de la Copa América

Era el encuentro que nadie quiere jugar. La final de consolación. Messi pelea con Medel por un balón que se escapa por la línea de fondo. Luego, ambos jugadores se encaran, por lo que son expulsados por el colegiado paraguayo Mario Díaz de Vivar.

"Fue por confrontar con el adversario en un incidente sucedido cuando el balón ya no estaba en juego, propinando un fuerte golpe con el hombro al adversario", escribió el árbitro en el acta. "No tenemos que ser parte de esta corrupción, de esta falta de respeto. Estábamos para más. La corrupción, los árbitros y todo eso no permite que la gente participe del fútbol, del show y lo arruina un poco, replicó un irritado Messi, denunciando que "la Copa América estaba armada para Brasil".

4.- 2021, Barça

17 de enero. Barça - Athletic (2-3). Final de la Supercopa de España.

Estaba agotando la final los últimos segundos de la prórroga. Agarra Messi el balón, ya en campo del Athletic, e intenta superar la oposición de Villalibre, a quien se saca de encima con las manos. Gil Manzano, que había pitado inicialmente falta del delantero vasco, es reclamado por el VAR para que examine la jugada.

Tras la revisión se dirige al encuentro de Messi y le enseña la tarjeta roja directa. La primera que ve Messi desde que es profesional. Luego, lo argumenta en el acta arbitral: "Golpear a un contrario con el brazo haciendo uso de fuerza excesiva estando el balón en juego pero no a distancia de ser jugado".

No interpreta Gil Manzano que exista agresión, lo que significaría una sanción de 4 a 12 partidos sino que lo ve como un lance del juego. Ahora, Messi aguarda la decisión del Comité de Competición.

Un castigo que deberá cumplir tanto en la Copa -el Barça juega el jueves en Cornellà- como en la Liga -los azulgranas visitan el domingo el campo del Elche-.